El Gobierno nacional avanza con la definición de una tarifa plana de gas para los usuarios residenciales durante el invierno con descuentos que llegarán a un 20% sobre el aumento que se determine. La idea es aplacar el golpe al bolsillo en los meses de mayor consumo.

La rebaja surge en meses de calendario escolar y como un guiño para sus aliados de la CC-ARI y la UCR, desde donde se había pedido revisión de los incrementos.

De esta manera, el descuento se hará efectivo entre los meses de mayo y septiembre, y esa diferencia será pagada por los usuarios en los meses de verano, a partir de diciembre. Las empresas también cobrarán intereses, que quedarán a cargo del estado nacional.

En abril se realizará una audiencia pública en a que se oficializarán incrementos desde octubre. De hecho, el Gobierno anticipó que las tarifas del gas sufrirán aumento que podría alcanzar el 30%.