Argentina figura entre los ocho países del mundo con mas infraestructura para el tráfico de Internet, según el informe «El estado de la banda ancha 2017», publicado esta semana por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), organismo de Naciones Unidas, que alertó que la brecha digital entre países desarrollados y en desarrollo puede convertirse en «un abismo».
Este estudio anual «muestra el estado y las tendencias de los despliegues de banda ancha en todo el mundo», explicó la UIT, que identificó que durante el último año «ha habido un crecimiento del número de nuevos Puntos de Intercambio (IXP), una infraestructura de apoyo que puede ayudar a reducir la latencia y los costos de tránsito» en línea.
Los IXPs (Internet Exchanges Points) son componentes fundamentales de la red, ya que a través de ellos se produce el intercambio de tráfico entre las redes de diversas entidades (operadores, proveedores de acceso, organismos de gobierno, entidades académicas, etc.) y su objetivo es lograr la eficiencia del ruteo de Internet, mejorando la calidad de servicio y minimizando los costos de interconexión, tal la explicación de la Cámara Argentina de Internet.
El documento del organismo de ONU resaltó a los ocho países que tienen más de diez IXP nacionales: Estados Unidos (84), Brasil (27), Rusia (21), Argentina y Alemania (20), Australia (18), y Francia y Japón (16).
En relación a las desigualdades de acceso, el informe consignó que «el 52% de la población mundial aún no tiene acceso a Internet», y señaló que «ha crecido la conexión en países desarrollados, mientras que se mantiene estática en países en desarrollo».
Las diferencias entre las naciones con una infraestructura madura de alta tecnología y los países en desarrollo también se profundizaron porque un uso más amplio de la tecnología podría ayudar a otros objetivos sociales, como una agricultura más sostenible o una mejor salud para los ciudadanos, destacó el estudio.
«Las herramientas digitales pueden aumentar el acceso a la salud, capacitar a los pacientes y proporcionar una mejor información sobre salud y educación para todos», fue una de las conclusiones.
En cuanto a estimaciones, el análisis concluyó que la penetración de Internet en el mundo en desarrollo llegará al 41,3% a finales de 2017, mientras que los usuarios «sólo serán el 17,5% en los países menos adelantados. Los hombres también continúan superando a las mujeres en términos de uso de Internet en todo el mundo, aunque este es un problema mucho mayor en los países en desarrollo, especialmente en Africa».
«Los objetivos para la educación, la igualdad de género y la infraestructura incluyen metas audaces para la tecnología de la información y la comunicación. El informe describe cómo la banda ancha ya está contribuyendo a esto y hace valiosas recomendaciones sobre cómo puede aumentar esta contribución en el futuro «, resumió Houlin Zhao, secretario general de la UIT.
Otro dato que destacó la pesquisa es que el 80% de todos los países que integran la UIT tienen un Plan Nacional de Banda Ancha, apartado donde se mencionó el programa local Argentina Conectada.
También indagó sobre conexiones y situaciones de personas «sub conectadas», resaltando que «todavía hay menos de la mitad de la población mundial conectada y utilizando Internet (48%). El 76% de la población mundial vive dentro de la zona de acceso a una señal 3G y sólo el 43% de las personas tienen acceso a una conexión 4G. Hay pruebas que sugieren que el 4G se está extendiendo en centros urbanos en paralelo con las redes 3G existentes, en lugar de en áreas no conectadas».
Fomentar la inversión en nuevas infraestructuras, revisar los marcos normativos para la banda ancha y el uso compartido de infraestructuras, son algunas de las sugerencias de «El estado de la banda ancha 2017».