El bloque de Cambiemos presentó un proyecto de ley en la Cámara de Diputados bonaerense que busca ajustar las condiciones de funcionamiento de las colonias de vacaciones «a fin de garantizar una mayor protección de las niñas, niños y adolescentes que participan de estos espacios».
La iniciativa, que presentó la diputada Carolina Píparo, se estudia en las comisiones de Educación, Niñez y Adolescencia, y Legislación General y pretende incorporar una mayor cantidad de profesionales a cargo del grupo de colonos, como así también incrementar la vigilancia en torno a las piscinas durante la jornada.
La propuesta busca modificar la actual Ley 13.424 que rige a las colonias de vacaciones para que los ayudantes de los profesores de educación física a cargo de los niños sean «maestros y/o estudiantes de la carrera de Educación Física que posean como mínimo un cincuenta por ciento de materias aprobadas».
Además, de acuerdo al proyecto, las colonias que cuenten con piletas deberán contar con por lo menos dos profesionales con el título de guardavidas, «quienes deberán permanecer en el natatorio durante toda la jornada» y un personal médico asistencial.
También establece la obligatoriedad de que haya dos guardavidas cada 50 colonos y determina que no podrá haber más de 10 niños por cada veinte mil litros de agua por natatorio.
El proyecto del bloque oficialista remarca que deberá haber para el cuidado general «dos profesionales cada 15 niños en edades que van de tres a cinco años y dos profesionales cada 25 niños en edades que van de seis a 16 años».
En el caso de las actividades acuáticas, en cambio, la relación será de un número «no menor a dos profesionales cada 12 niños en el primer nivel de edad y de un número no menor a dos profesionales cada 20 niños en el segundo nivel de edad».
Todo profesional deberá contar como mínimo con un ayudante.
Píparo explicó que «presento este proyecto porque creo que es vital intentar evitar tragedias como las que nos han conmovido recientemente», en alusión al caso de Lucas Lin, el niño que el 5 de febrero último murió ahogado en la colonia del colegio Lincoln en la capital bonaerense.
«Entiendo que cada vez que dejamos a nuestros hijos en un espacio educativo o recreativo y no podemos estar ahí, vigilando que nada les pase. Nuestra idea es reforzar el control dentro de la institución en general y en la zona de las piletas en particular», dijo.
Para la legisladora «esto va a redundar en beneficio para toda la comunidad y especialmente para los niños».
«Priorizamos la seguridad de los niños y también la tranquilidad de padres necesitan saber que cuando dejan a sus hijos en una colonia hay suficiente personal cuidándolos», finalizó.