El oficialista frente Cambiemos busca mostrar que no está dispuesto a dilatar el tratamiento del pedido judicial de desafuero en contra de Cristina Fernández de Kirchner a pesar del malestar que provocó en el peronismo del Senado el llamado a sesión especial para discutir el tema el próximo martes.
«Sabemos que es muy difícil conseguir quórum pero el plazo para tratar el desafuero vence el martes así que no podíamos dejar sin respuesta el requerimiento del juez Claudio Bonadio», declaró a Télam una alta fuente del bloque del oficialismo.
En el PJ que comanda Miguel Pichetto «cayó muy mal» la convocatoria a una sesión especial a menos de 24 horas de una votación tan trascendente como la del Presupuesto, en la que los votos peronistas fueron decisivos para aprobar la ley de gastos.
«Además, se trata de una causa en la que a los que estaban con prisión preventiva se las dejaron sin efecto», se quejó una fuente de la bancada peronista, en alusión a la excarcelación del ex secretario Legal y Técnico del gobierno kirchnerista, Carlos Zanini, libre a la espera del juicio oral.
Con las firmas del jefe del interbloque, Luis Naidenoff, de sus pares radicales Julio Martínez y Silvia Elías de Pérez, y de los senadores de PRO Federico Pinedo y Humberto Schiavoni, Cambiemos pidió la sesión especial para este martes, a las 16.
«Si hacíamos esta convocatoria antes de la discusión del Presupuesto hubiera sido peor», si sinceró un vocero de Cambiemos.
La coalición oficialista en el Senado no ignora que será «complicado» conseguir el quórum para sesionar (se necesitan 37 senadores sólo para abrir el debate), pero pretende aún así «dar una señal hacia afuera», en el inicio de un año electoral, de que «nadie en la Cámara apaña» a la ex mandataria.
«La esperanza es lo último que se pierde», declaró el senador del PRO Esteban Bullrich ante las dificultades para reunir el quórum y al confirmar que se trataría el pedido judicial.
El jefe de la bancada peronista, Pichetto, expresó en reiteradas oportunidades que no apoyará el desafuero de la ex mandataria hasta tanto «no exista una sentencia firme».
Su colega de bancada, José Mayans, dijo que es «una verguenza» debatir el desafuero y que no avalaría «el circo» que según él «pretende Cambiemos» con esta discusión.
El juez Bonadio emitió el pedido de desafuero el año pasado en el marco de la causa en la que acusa a la ex jefa del Estado por el encubrimiento del atentado a la AMIA como consecuencia de haber firmado durante su gobierno un Memorandum de Entendimiento con Irán para «facilitar» la declaración de los funcionarios iraníes involucrados en el ataque.
Bonadío tiene redactado otro pedido para que se despoje a Fernández de Kirchner de los fueros parlamentarios que le permiten no ser detenida, en la llamada causa de los cuadernos por la que fue imputada por el manejo irregular de fondos públicos.
El juez supeditó, no obstante, este último requerimiento a que la Cámara confirme su resolución en contra de la ex mandataria.
Bonadio procesó a la ex presidenta y se solicitó al Senado su desafuero para cumplir con la prisión preventiva por considerar que ella tomó la decisión deliberada de encubrir y dotar de impunidad a los acusados iraníes por el atentado con el fin de restablecer plenas relaciones comerciales a nivel estatal y promover un acercamiento geopolítico con Irán.
A mediados de agosto último, la ausencia de la mitad de los 72 senadores que integran la Cámara alta impidió avanzar con un pedido de allanamiento al domicilio de la senadora, formulada también por Bonadio en la causa que investiga el supuesto cobro de coimas en la obra pública durante el kirchnerismo.