Cultura, naturaleza e historia son los principales condimentos de El Corredor de los Llanos, uno de los cinco circuitos temáticos diseñados por la provincia de La Rioja para que los turistas conozcan en forma rápida sus atractivos de diversa índole.
Este recorrido, llamado también Ruta de los Caudillos, arranca en la capital provincial, donde uno los atractivos más importantes es la casa de Joaquín Víctor González -quien fuera gobernador riojano-, actual archivo histórico de la provincia.
El circuito también incluye la Casa de Gobierno, una construcción de estilo neocolonial con una pinacoteca en la que se encuentran los retratos al óleo de todo los gobernadores riojanos.
Dentro del mismo Corredor se pueden visitar en la ciudad circuitos menores, como la Ruta del Artesano, el Circuito Religioso y el paseo cultural Castro Barros.
El secretario de Turismo de la ciudad de La Rioja, Gustavo Agüero, señaló a Télam que además, alejado del centro capitalino, se encuentra el Parque de la Ciudad, «que tiene una vegetación y unos paisajes maravillosos, el paraje Las Padercitas y el Golf Club de La Rioja».
El monumento el Tinkunaco, el museo Folclórico, la iglesia San Antonio, y el dique Los Sauces, con su lago artificial y balneario, completan la lista de atractivos turísticos de la capital provincial y sus zonas aledañas.
El Corredor de los Llanos continúa en Patquía, donde se encuentra la reserva provincial Los Colorados, y en Chamical, conocida como la puerta de los llanos de La Rioja.
El intendente de Chamical, Daniel Elías, señaló a esta agencia que ese pintoresco poblado «cuenta con un circuito de trekking y senderismo, y con parajes como Polco, un territorio que conjuga historia, mito y religión en honor a la Virgen del Rosario».
Otros lugares de interés turístico de Chamical son «La Aguadita, un dique con un balneario, y Santa Bárbara, que se destaca por su identidad cultural y sus productos artesanales», agregó el jefe comunal.
Malanzán marca la continuidad de este recorrido, que en esta localidad permite disfrutar de las bellezas de los parajes Huaja, donde nació el general Ángel Vicente Peñaloza, y Anajuacio, la finca de descanso de Facundo Quiroga, con vistas panorámicas muy desarrolladas de la zona de los valles riojanos.
El secretario de Turismo riojano, Álvaro del Pino, mencionó como otros atractivos de ese pueblo al «museo Runa Huasi, con más de mil piezas de la cultura olongasta, y la reserva Guasamayo, un lugar con hermosos paisajes y sitios para los turistas interesados en antropología, etnografía y la geología».
El circuito sigue por Los Mogotes, con atractivos como la Piedra de los Morteros y la del Vertedero, el río, Las Torres, los morteros comunitarios, y El Elefante, una formación de granito rosado que emula a un paquidermo acostado.
Las Sierras de Tuaní, una extensa planicie con caseríos rurales dispersos en plantaciones de nogales, completa la oferta turística de esta zona del Circuito de los Llanos.
Del Pino sostuvo que «este circuito es especial para el Turismo Religioso, porque posee una gran cantidad de distritos dispersos que en todos los casos cuentan con el patrono del lugar, lo que da lugar a la existencia de iglesias y capillas construidas con distintos estilos arquitectónicos».
Uno de ellos es Tama, con la colonial iglesia de Nuestra Señora del Rosario, que atesora los archivos parroquiales de las partidas de nacimiento y matrimoniales de los caudillos riojanos.
Otras localidades del corredor son Chepes, donde el principal atractivo es el museo De los Caudillos, y Ulapes, con su dos lagunas circundadas por el Salar de Mascasin
El funcionario también mencionó a «la reserva natural Quebrada de los Cóndores, como una de las atracciones salientes en este recorrido.
Del Pino explicó que se trata de «una meseta de granito negro, rosa y gris, con emprendimientos ecológicos, turísticos y rurales para disfrutar de las comidas regionales, las cabalgatas, el rappel, las escaladas, la pesca y los safaris fotográficos, entre otras actividades».