El gobierno bonaerense lleva adelante un plan para urbanizar este año un total de 70 barrios populares en 32 municipios, con una inversión de 28 mil millones de pesos, informó Romina Barrios, directora ejecutiva del Organismo Provincial de Integración Social y Urbana (OPISU).
De acuerdo al último Registro de Villas y Asentamientos, en la provincia de Buenos Aires existen un total de 1.933 barrios populares, de los cuales 1.559 se encuentran ubicados en el conurbano.
En una entrevista con esta agencia, la funcionaria destacó que «hay una decisión del Gobierno de trabajar en un proceso transformador real» de las villas.
Por eso, contó que en una primera instancia se trabajó en los distritos del Gran Buenos Aires, dado que es la zona «con más cantidad de asentamientos».
«El OPISU -organismo dependiente del Ministerio de Desarrollo Urbano y Hábitat en el que también se encuentra el Instituto de la Vivienda- tiene dos prestamos heredados de la gestión anterior: uno del Banco Mundial y otro del Banco Interamericano de Desarrollo por 200 millones de dólares para abordar con una mirada integral el déficit habitacional», dijo la politóloga.
En ese marco, Barrios subrayó que «mientras la Ciudad cuenta con 3 millones de habitantes desde hace 75 años; en ese mismo lapso, la provincia de Bueno Aires multiplicó por 4 su población» y razonó que en territorio bonaerense «hubo un crecimiento poblacional muy importante».
«Por eso, hacemos un esfuerzo muy grande para poder abordar el problema en la escala que lo merece tanto en las zonas mas pobladas del Gran Buenos Aires, como en municipios del interior como Olavarría o Mar del Plata», prosiguió.
En ese sentido, la funcionaria explicó que urbanizar «significa muchas cosas», pero puso de relieve que «una mirada en la que ahora todos estamos de acuerdo es en que no se trata de erradicar» esos barrios, sino de «construir viviendas nuevas o mejorar las existentes».
Rememoró que recientemente la administración bonaerense lanzó el programa de créditos Crea para ampliación o refacción de hogares a tasa cero que beneficiará a 50.000 familias.
Indicó luego que se busca que esos barrios tengan «acceso a los servicios públicos, agua, cloacas, obras pluviales, iluminación, pavimento, mejoras de espacios públicos y comunitarios» y contó que, para ello, se trabaja con las empresas prestatarias.
«La tarea también incluye el desarrollo urbano y el ordenamiento territorial en la trama urbana de la ciudad, así como mejoras de pavimento y circulación», recalcó y remarcó que «la propuesta, en trabajo conjunto con los municipios y las cooperativas, es generar un proyecto compartido que pueda continuar más allá de las diferentes gestiones».
«Pensamos en términos de dignidad y se trata de un abordaje integral. El Estado está en deuda en términos de hábitat, por lo que queremos ir resolviéndolo. Estas gestiones nacional y provincial comenzaron a reconocer el problema apenas asumieron como una cuestión urgente a resolver», indicó Barrios.
La titular del OPISU enfatizó que desde la gestión de Axel Kicillof «hay una mirada de que es posible» y aunque reconoció que la urbanización de los asentamientos es una tarea compleja, afirmó que «se puede trabajar en el ordenamiento de los barrios».
«Tiene que haber una firme decisión política, recursos técnicos y trabajo coordinado con las empresa de servicios públicos. Es una obligación para nosotros saldar esta deuda que tenemos con la democracia: no puede haber barrios sin acceso a servicios básicos», concluyó.