En el primer semestre de 2017 se recibieron 2.946 casos de abuso infantil de menores en la provincia de Buenos Aires, lo que arroja unos 416 abusos infantiles al mes, unos 14 por día y representaría un promedio de un abuso en menos de dos horas, según datos aportados por el Organismo Provincial de la Niñez y la Adolescencia, a partir de un pedido de la Defensoría del Pueblo.
Las estadísticas se basan en las intervenciones y acciones adoptadas por el organismo estatal a partir del momento en que se toma conocimiento de episodios vinculados a abusos sexuales por distintas vías, representando el 30% de los casos provenientes de llamados al 911.
Según la información, San Isidro es el municipio con más cantidad de casos (262), mientras que en La Plata durante 2016 las intervenciones por casos de abusos sumaron 170 episodios, lo que significaría uno cada dos días.
En cuanto datos del primer semestre de 2017, en la capital bonaerense se registraron 188 casos lo que equivale a una intervención por día, y la localidad de Azul, se constataron unas 143 intervenciones por abuso infantil, según consta en el informe al que tuvo acceso Télam.
“Si se anualiza los datos del primer semestre de 2017, surge que la cifra de abusos infantiles registrados es superior en un 50% respecto a 2016”, señaló al respecto Walter Martello, defensor del pueblo adjunto.
Los datos, que forman parte del Registro Estadístico Unificado de Niñez y Adolescencia (R.E.U.N.A), indican además que el 11,37% de las intervenciones de la Provincia por vulneración de derechos de niños, niñas y adolescentes están vinculadas a episodios de abusos y que de ese total, el 61% de las víctimas tienen entre 6 y 17 años.
Del total informado, en 237 casos de abuso sexual, el organismo provincial tuvo que tomar «medidas de abrigo», es decir separar al niño de su entorno familiar, mientras que 496 niños en el primer semestre 2017 fueron institucionalizados y tuvieron que intervenir centros de día.
En tanto, unos 621 casos fueron derivados por el Poder Judicial al Organismo de Niñez, y solamente el 10% de los casos se presentaron espontáneamente a hacer la denuncia, mientras que en 307 intervenciones, más del 12,7%, fue a pedido de autoridades de las escuelas.
“En la Provincia se lograron algunos avances en materia de políticas sociales en el último año, que tuvieron un incremento en el porcentaje de asignación presupuestaria respecto a 2017. Pero aún estamos lejos de lo que realmente se necesita», dijo Martello.
Agregó que en este año, el presupuesto del ministerio de Desarrollo Social, del cual depende el Organismo Provincial de la Niñez y Adolescencia, representa el 2,57% del total del presupuesto provincial, mientras que en 2007 se quedaba con el 5%.
«Esta diferencia representa unos 31.000 millones de pesos, siendo recursos que en caso de estar disponibles posibilitaría fortalecer la contención a las víctimas de este flagelo”, completó.
Entre las iniciativas que estuvieron en estudio en la Legislatura y que no avanzaron o que quedaron archivadas, Marello mencionó proyectos para crear un protocolo de abordaje integral para todas las instituciones públicas ante sospechas de abuso infantil.
También nombró una iniciativa «que ni siquiera llegó a ser tratada en sesión del Parlamento» que buscaba crear fiscalías especializadas en Violencia de Género y Abuso Infanto-Juvenil en todos los departamentos jurisdiccionales de la Provincia.