La senadora nacional Cristina Kirchner planteó hoy una cuestión de privilegio en el inicio de la sesión especial en la que se tratará el Presupuesto 2018 para manifestar su rechazo al pedido judicial de desafuero en su contra en la causa del encubrimiento del atentado a la AMIA, pedido al que consideró como «un avasallamiento de la representación política institucional».
La ex Presidenta pidió el uso de la palabra en la apertura de la sesión para denunciar la «utilización del disparate de una causa absolutamente ridícula para afectar la representación política institucional», en alusión a la causa en la que fue imputada por traición a la Patria por el juez federal Claudio Bonadio.
En su debut como senadora luego de dos ausencias consecutivas en la Comisión de Presupuesto que integra, Fernández de Kirchner hizo uso de la palabra más de 20 minutos, pese a que la vicepresidenta Gabriela Michetti le pidió en dos oportunidades que respetara el tiempo reglamentario, y mantuvo de a ratos un diálogo personal con la presidenta del Senado, en quien focalizó sus reclamos hacia el gobierno nacional.
«Es notable cómo su gobierno públicamente dice qué tipo de oposición quieren. Es posible que a usted y al Presidente (Mauricio Macri) no le guste el tipo de oposición que haremos. A mí no me gusta el gobierno que ustedes hacen y no por eso voy a pretender que se vaya», sostuvo Fernández de Kirchner, quien acusó a la administración de Mauricio Macri de pretender «oposiciones de diseño».
La ex mandataria calificó de «insólito» el fallo de Bonadio, afirmó que forma parte de un intento de «avasallamiento» de la representación parlamentaria y cuestionó lo que consideró como «una utilización del Poder Judicial para perseguir y desprestigiar dirigentes».
La senadora aseguró que la Justicia actuó de modo distinto con la denuncia contra la vicepresidenta en el caso de la firma de un memorándum el año pasado con Qatar, que involucraba fondos de la ANSES, y declaró que el gobierno nacional se «articula con los medios para provocar condenas previas sin juicio a dirigentes de la oposición».
Fernández de Kirchner también cuestionó la reforma previsional y el acuerdo del Gobierno con los gobernadores.
«Hubo mecanismos mafiosos», sostuvo en alusión a supuestas presiones de gobernadores a sus diputados para la aprobación de esa iniciativa.
Después de dos ausencias consecutivas en la Comisión de Presupuesto, Fernández de Kirchner se presentó hoy en la última sesión parlamentaria del año para plantear una cuestión de privilegio en relación a la causa en la que está implicada y por la que se pidió su desafuero, aún no tratado por el Senado.
Al término de su alocución, la vicepresidenta Michetti le dio las gracias y le aclaró que ella no había firmado ningún memorándum con Qatar.