Los principales gremios docentes bonaerenses aseguraron que la adhesión al paro de 48 horas iniciado hoy en las casi 16.000 escuelas de la provincia fue aproximadamente del 85%, mientras que para el gobierno la medida de fuerza fue acatada por el 47% de los maestros.
«De los 12 mil servicios educativos públicos que hay en la provincia, sólo no abrieron 346. Del total de docentes de escuelas publicas hubo un 47% de ausentismo y en educación privada hay un presentismo de casi el 100%», precisaron a Télam fuentes de la administración bonaerense en base a un revelamiento realizado durante el turno mañana.
Las fuentes precisaron que estiman que durante la tarde «el ausentismo docente será aún menor».
En ese sentido, el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (Suteba), Roberto Baradel, aseguró que la huelga «tiene una adhesión del 85% de los docentes en distritos del interior de la provincia y del Conurbano».
«Es un paro contundente y fracasó el intento de meter miedo para que la gente no pare», señaló a Télam, y puntualizó que «si un pequeño porcentaje de maestros fue a trabajar es por miedo a los descuentos».
El sindicalista sostuvo que «este es un gobierno que desprecia a los docentes y a la escuela pública y niega el diálogo permanentemente».
Insistió en que la huelga, que impide el normal comienzo del ciclo lectivo 2018 en las casi 16.000 escuelas de la provincia, se debe «la falta de una paritaria nacional».
«En la provincia nosotros tendríamos que haber iniciado las conversaciones en diciembre, pero a último momento nos convocaron para hacernos tres ofertas idénticas», dijo.
Además reiteró en que parte del reclamo es porque el sector docente no quiere «perder poder adquisitivo» en momentos en que «el gobierno ofrece 15% o nada» y recordó que los sindicatos de docentes piden «20% de aumento con cláusula gatillo».
También afirmó que durante el fin de semana «no hubo contactos» con referentes del Gobierno, aunque «igual» el sindicato apuesta «a que haya diálogo y a que esta situación se pueda resolver».
En tanto, Miguel Díaz, el secretario general de Udocba, explicó a esta agencia que «en base a los relevamientos realizados, el paro es muy alto y tiene una adhesión del 87% entre el interior y el Conurbano».
«Es evidente que hay una respuesta, un grito de los docentes a la gobernadora para que cambie de actitud y de respuestas. Esperamos que sea leído, porque si no el conflicto va a ser largo», vaticinó.
Díaz expuso que «el año pasado también dijeron que no alcanzaba para ofrecer más aumento y al final era mentira, porque tenían más plata y finalmente pagaron más» y apuntó: «si nos convocan, estamos dispuestos a hablar mañana mismo».
En ese tono, la secretaria general de la FEB, Mirta Petrocini, explicó en un comunicado que el paro «registra una adhesión de entre el 85% y el 90% en la provincia de Buenos Aires».
«Esta medida de fuerza es el resultado de la falta de diálogo por parte del gobierno provincial, que intentó demonizar a los docentes y a sus representantes», destacó, y agregó que «el paro es la última instancia a la que debimos recurrir ante la decisión de las autoridades de no realizar una oferta salarial acorde a las necesidades del sector».
Sostuvo que «si realmente querían discutir salarios con los chicos dentro de las escuelas, nos hubieran recibido en noviembre o en diciembre y no a último momento para hacernos tres propuestas insuficientes».
«Sabemos también que hoy hay muchos docentes que tuvieron que ir a trabajar, incluso apoyando la medida de fuerza, porque un día de descuento les significa no poder pagar la luz o el gas o poner un plato de comida en la mesa. Más de la mitad de los docentes se encuentra hoy por debajo de la línea de la pobreza», finalizó.
En tanto, el ministro de Economía de la provincia de Buenos Aires, Hernán Lacunza, afirmó que no están lejos de un acuerdo con los gremios docentes ya que «las diferencias no son sustantivas», pero consideró que «no debería haber ningún día de paro».
«No estamos lejos de un acuerdo», dijo Lacunza esta mañana a radio Con Vos, al tiempo que pidió que «haya vocación negociadora y de diálogo» de parte de los gremios y solicitó que «no haya intransigencia o caprichos» por parte de sus dirigentes.
Lacunza recordó que en paritaria el gobierno provincial ofreció «un 15% de aumento salarial, que significa que el ingreso promedio de un docente pasa de $24.500 a $28.300, además de sumar un plus de $6.000 anuales por presentismo, de forma que se pueda mejorar el ingreso del docente que está en el aula».
«La provincia tiene recursos escasos y tenemos un ausentismo muy elevado, entonces buscamos premiar al docente que está frente al aula», dijo, y agregó que en el último encuentro mantenido con los sindicatos agregaron «una cláusula de revisión en octubre para compensar diferencias si la inflación fuera superior».
El ministro remarcó que «el salario docente promedio es de $24.500» y, si bien reconoció que le «encantaría que ganen más», recordó que se trata de «dinero público» y que «la provincia tiene déficit».