El segundo detenido por el asalto al turista sueco Christoffer Persson, a quien debieron amputarle una pierna tras ser baleado en el barrio porteño de Monserrat a fines de diciembre, confesó hoy ante la justicia que disparó contra la víctima aunque argumentó que el tiro se le escapó y que luego del hecho se descartó del arma utilizada, informaron fuentes judiciales.
Se trata de Roberto Gramajo (25), apodado «Chicho» y con antecedentes penales por robo, quien esta mañana fue indagado por el juez de Instrucción Alfredo Godoy, en los tribunales de Lavalle 1638.
Fuentes judiciales informaron a Télam que el acusado, asistido por el defensor oficial Alberto Giordano, reconoció ante el magistrado y el fiscal de la causa Marcelo Retes que él disparó contra Persson en el marco de un robo pero explicó que el tiro se le escapó.
El imputado también confesó que esa noche había salido a robar con el otro acusado detenido, Rodrigo Peláez (22), y que él se sentó en el asiento trasero del auto que su cómplice conducía para poder bajar y subir del mismo a la hora de cometer un robo, detallaron los voceros.
Las mismas fuentes señalaron que Gramajo aclaró que la pistola no era suya y que luego del asalto a Persson la arrojó al Riachuelo porque se asustó.
Además, los investigadores judiciales establecieron que el sospechoso tenía una condena de tres meses en suspenso de 2018 en provincia de Buenos Aires y una «probation» -suspensión de juicio a prueba- de 2015.
Tras la indagatoria, Gramajo seguirá detenido mientras el juez resuelve su situación procesal y también la de Peláez, quien el viernes pasado se había negado a declarar ante el magistrado.
Sin embargo, ante los policías que lo detuvieron, el joven aparentemente señaló a «Chicho» como el autor del disparo que hirió al turista.
En tanto, a raíz del esclarecimiento del hecho, esta mañana el vicejefe de Gobierno porteño a cargo del Ministerio de Justicia y Seguridad de la ciudad, Diego Santilli, junto al secretario de Seguridad, Marcelo D’Alessandro, y al subjefe de la Policía de la Ciudad, Gabriel Berard, reconocieron a los efectivos de las distintas áreas que estuvieron involucrados en la pesquisa.
Para Santilli, el asalto al turista fue un «hecho imperdonable» y remarcó la «importancia» de la «capacidad tecnológica instalada en la ciudad», que fue clave para que una subcomisario, a la que calificó como «extraordinaria» y con «dones de reconocimiento», diera con el vehículo presuntamente utilizado en el hecho.
«A partir de ahí, todo nuestro cuerpo de investigaciones de la Policía de la Ciudad empezó a hacer un trabajo exhaustivo hasta detener a estos delincuentes que tenían antecedentes de robo a mano armada», agregó.
Además, destacó «el trabajo de la Justicia, tanto del fiscal como del juez, que han trabajado extraordinariamente bien para dar con los sospechosos».
«Para nosotros, como argentinos en la Ciudad de Buenos Aires, todo aquel que comete este tipo de delitos tiene que pagarlos, y pagarlos es haber puesto a disposición de la Justicia a estos malvivientes, y espero que les caigan con todo el peso de la ley», finalizó Santilli.
Por su parte, D’Alessandro aseguró en diálogo con radio La Red que la investigación se «llevó adelante con el uso de la tecnología y el profesionalismo de los hombres y mujeres de la Policía de la Ciudad, que lograron dar con la trazabilidad del vehículo, identificarlo, identificar a quien manejaba y el sábado, a través de un operativo cerrojo, detener a quien realizó el disparo».
El funcionario dijo que los dos detenidos «tenían muchos antecedentes de robo y lamentablemente estaban en la calle delinquiendo», por lo que espera que «esta vez no sea así y cumplan la condena que tienen que cumplir».
Gramajo fue detenido la noche del sábado último en la casa de su novia, en la Isla Maciel, de la localidad bonaerense de Dock Sud, partido de Avellaneda.
Por el caso Peláez ya había sido apresado el jueves pasado, también en Avellaneda, como acusado de conducir el auto utilizado en el asalto.
En los allanamientos. los pesquisas secuestraron un vehículo que pertenece a la empresa constructora para la que trabaja el padre de Peláez.
El turista sueco fue atacado la noche del 30 de diciembre último en el cruce de Tacuarí y Venezuela, a una cuadra de avenida 9 de Julio, en Monserrat.
Persson (36) iba junto a su novia, una periodista llamada María Izzo, cuando fue sorprendido por un joven que lo baleó con fines de robo.
Luego del resultar herido, el turista fue llevado de urgencia al Hospital Argerich, donde los médicos tuvieron que amputarle la pierna por la lesión sufrida.