El Gobernador bonaerense, Axel Kicillof, participó hoy de un homenaje a la Madre de Plaza de Mayo Hebe de Bonafini, fallecida el 20 de noviembre, y tras afirmar que hay que «convertir el dolor y la pérdida en más fuerza» recordó que «el mensaje de Hebe era nunca bajar los brazos y seguir militando hasta la victoria».
«Es difícil caer en la falta y en la ausencia. Hay que ir elaborando y convirtiendo el dolor y la pérdida en más fuerza. Para la democracia argentina, la voz de Hebe, su esencia, su palabra, sus acciones, sus intervenciones en momentos duros fue importante», afirmó el Gobernador.
Kicillof encabezó este mediodía el acto de imposición del nombre de Hebe de Bonafini al auditorium de la Subsecretaría de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, en la ciudad de La Plata.
Tras descubrir la placa con el nombre de la fundadora de Madres de Plaza de Mayo, el mandatario bonaerense recordó la cotidianeidad de encontrar a Hebe de Bonafini participando en algún acto de su gestión, o leer en la prensa diaria algunas declaraciones de la Madres y aseguró que «en este último tiempo fue muy importante Hebe y muchos de nosotros sentimos que a Hebe la conocimos de siempre».
«Cuando empezamos la militancia política, desde ahi, Hebe estaba presente. En la democracia fue importante, Por eso también cuando se habla de su desaparición física se habla que Hebe no se fue, o que es eterna, porque para muchos es eterna», sostuvo Kicillof.
El Gobernador recordó la forma de Hebe «de hablarles a los pibes y pibas, dedicaba tiempo a eso que es el puente generacional, el trasvasamiento».
«El éxito que tenía Hebe, más allá de todo lo que podía decir, es que le importaba una cuestión sincera, es ese corazón, ese sentimiento que le ponía. Más allá de su historia, sus aciertos, sus enfoques o caracterización, lo central de Hebe es que siempre habló a corazón abierto», dijo el Gobernador.
Recordó, aunque un auditorio repleto de jóvenes militantes, que la Madre de Plaza de Mayo «decía ´no se vende, no se negocia´y eso, aun con costos altísimos por decir lo que pensaba, por ir de frente, por no recular, fue la clave de su acciójn política, del enorme predicamento y llegada a camadas y camas de pibes y pibes que la tomaron como referente».
La Madre de Plaza de Mayo, Carmen Arias, agradeció el homenaje a su compañera de lucha y destacó que Hebe «era única. Y este homenaje nos da fuerzas para seguir luchando y poder cumplir todo lo que deseaba, para seguir luchando por lo que siempre lucharon las Madres».
Por su parte, el subsecretario de Derechos Humanos, Matías Moreno, explicó que el auditorio que desde hoy lleva el nombre de Hebe de Bonafini «había sido abandonado por la gestión anterior, y pudimos ponerlo en valor».
«Hablar de Hebe es hablar de la historia de las Madres que salieron a reclamar por la aparición de sus hijos e hijas. Es rescatarla, ya en el advenimiento de la democracia recorriendo todo el país. La primera que le dio un pañuelo a mi abuela, fue Hebe», dijo el funcionario bonaerense hijo del abogado laboralista Carlos Alberto Moreno, quien defendía a los trabajadores de la cementera Loma Negra, secuestrado y asesinado por la dictadura en 1977.
Moreno calificó a Hebe de «un actor político» y contó también que para aquellos hijos e hijas de víctimas de la dictadura que militaban en los 90 «Hebe era la madre que nos iba a rescatar cada vez que teníamos un problema con las fuerzas de seguridad. Hebe nos venías a rescatar».
«Y qué decir de Hebe en el 2003-2004, cuando se suma aun proyecto político que estábamos esperando todos y todas e inicia un camino donde el Gobierno les permite a las Madres no sólo reclamar por sus hijos sino por políticas públicas en el marco de un proyecto político. Eso es quizás lo que no le han perdonado los sectores que nunca quieren que avancen los derechos para las mayorías».
Afirmó que el mejor homenaje a Hebe de Bonafini es «seguir militando, articulando y organizando para el sueño de los 30 mil de una Patria más Justa, Libre y Soberana sea una realidad más».
Los y las jóvenes presentes en el auditorio comenzaron a cantar: «Hebe no se murió/ Hebe no se murió/ Hebe vive en el pueblo/ la p… madre que los parió».
«El mensaje de Hebe más claro, mas contundente, mas fuerte es que nunca hay que bajar los brazos, hay que seguir militando hasta la victoria», concluyó Kicillof, y motivó que los presentes se pusieran de pie y comenzaran a corear la tradicional canción peronista que recuerda los padecimientos sufridos por este movimiento político a lo largo de su historia.
«Somos de la gloriosa Juventud Peronista/Somos los herederos de Perón y Evita/A pesar de las bombas/ de los fusilamientos/ los compañeros muertos/ los desaparecidos./ no nos han vencido», cantó y aplaudió también el mandatorio bonaerense.