Los intendentes peronistas que conducen el PJ bonaerense, Gustavo Menéndez (Merlo) y Fernando Gray (Esteban Echeverría), evidenciaron sus diferencias respecto de la iniciativa oficial de prohibir que familiares directos de funcionarios públicos sean nombrados en el Estado.
En concreto, Menéndez, titular del justicialismo provincial no coincide con la medida de Cambiemos, en tanto Gray, vicepresidente de esa fuerza, avala esa medida.
Ante el decreto antinepotismo que firmó Mauricio Macri, Menéndez se manifestó en contra porque «una medida así puede derivar en situaciones injustas, que perjudique a funcionarios idóneos y de carrera».
«La verdad es que no comparto la mirada del Presidente, aunque estoy en contra del nepotismo», agregó el intendente de Merlo.
Menéndez fundamentó su posición en el artículo 16 de la Constitución Nacional que prevé: ‘La Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre, ni de nacimiento: no hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza. Todos sus habitantes son iguales ante la ley, y admisibles en los empleos sin otra condición que la idoneidad. La igualdad es la base del impuesto y de las cargas públicas’.
Con otra mirada, su segundo en la conducción del PJ, quien el año próximo asumirá la presidencia, confirmó que enviará al Concejo Deliberante de Esteban Echeverría una propuesta en línea con la del gobierno nacional y con la de la administración de María Eugenia Vidal.
En cualquier caso, Menéndez adelantó a un matutino porteño que prohibirá que familiares directos de funcionarios de Merlo sean proveedores del municipio que gobierna.
El primer intendente peronista en acompañar la disposición de Macri fue otro de los dirigentes justicialistas del sector dialoguista, Ariel Sujarchuk (Escobar), quien profundizó la iniciativa, ya que extendió la prohibición de contratar a los parientes de sus colaboradores directos «hasta la cuarta generación».