«El Reino», «Maradona: Sueño bendito», «Terapia alternativa» y «Entre hombres» son algunos de los destacados títulos argentinos que llegaron durante este año a la pantalla chica a través del streaming y que invitan a ilusionarse con un auténtico resurgimiento de las series nacionales de la mano de múltiples plataformas que, en feroz competencia, desarrollan decenas de contenidos para 2022 y los años subsiguientes.
El incremento, que contrasta con aquella -justificada- crítica hacia la TV de aire de no hace tantos años por la escasez de tiras argentinas y la proliferación de enlatados turcos y brasileños, es una vuelta intensa a la ficción local pero con otras características: el formato de temporadas breves se vuelve norma y las tramas se piensan desde lo local, pero para un público ampliado gracias al alcance internacional del streaming.
Lejos quedó la decisión de borrar las marcas de la argentinidad de la pionera «Epitafios» (2004), producida por Pol-ka para HBO Latinoamérica y que forzó a Julio Chávez y Paola Krum a recitar sus parlamentos en español neutro con la esperanza de penetrar mejor el mercado latino. Hoy la diferencia se acentúa: el público quiere ver series que luzcan y suenen del lugar en que se originan.
Es un panorama en el que las estrategias comerciales y la necesidad de apuntar a una masa de espectadores cada vez más diversificada se combinan en medio de la expansión definitiva de una forma de consumo, que en 2021 contó con la entrada en el país de nuevos jugadores de proporciones transnacionales: Paramount+, HBO Max y Star+, todas pertenecientes a grandes conglomerados como ViacomCBS, WarnerMedia y The Walt Disney Company, respectivamente.
Las tres llegaron a disputar un espacio que no estaba vacante: Netflix, Amazon Prime Video, Disney+, Flow, Contar, Cine.ar, Starzplay, Apple TV+, con dimensiones y aceptación dispar, eran algunas de las plataformas que ya reclamaban por el tiempo -y en la mayoría de los casos- la billetera de argentinos y argentinas.
La búsqueda por una atención y recursos limitados en un escenario más apretado se traduce en la producción de contenido local con estándares de calidad superiores y temáticas más diversas también a los de la TV de aire. La industria del streaming propone e impone a la vez un formato masivo hasta hace poco menos explorado por las producciones argentinas, más vinculado al atracón maratónico que a las dosis periódicas de contenido.
Paradójicamente, la TV que ya casi no produce ficción, incluso comienza a alimentarse de lo que generan las plataformas: este año «Maradona: Sueño bendito» (Amazon Prime Video) tuvo su preestreno por El Nueve, «Pequeñas Victorias» (también de Amazon) tuvo luego pantalla por Telefe, y «Terapia Alternativa» (Star+) llegó a eltrece.
A la cabeza de la tendencia que tiene a argentinos delante y detrás de cámara se encuentran la siempre reinante Netflix y la recién llegada pero ambiciosa Star+, que desembarcó el pasado 31 de agosto en Argentina y el resto de Latinoamérica para complementar el catálogo de Disney+ con un foco en el público adulto.
En ese sentido, el gigante del streaming tuvo su primer plato fuerte de 2021 con el relanzamiento de «Okupas», la serie que marcó un hito en el contenido televisivo argentino hace 21 años y que fue remasterizada y adoptó una nueva banda de sonido a cargo del platense Santiago Motorizado.
Poco después de su «reestreno», que fue acompañado con furor en redes sociales, Netflix volvió a la carga con «El Reino», la tira de suspenso político y religioso protagonizada por Diego Peretti y Mercedes Morán que sumó visibilidad cuando se convirtió en blanco de críticas de distintas iglesias evangélicas, que acusaban a sus creadores de representar la institución de manera difamatoria.
De 2022 en adelante la plataforma planea incluir en su oferta otros siete títulos de producción argentina, entre los que destacan la esperadísima producción de Bruno Stagnaro «El eternauta», basada en la fundamental historieta de Héctor G. Oesterheld; «El amor después del amor», serie biográfica centrada en los 40 años de carrera de Fito Páez -que oficiará como productor-; y «Granizo», largometraje de comedia con Guillermo Francella y dirección de Marcos Carnevale.
De cerca le sigue Star+, que el mismo día de su lanzamiento estrenó un nuevo episodio de «Bios. Vidas que marcaron la tuya», la serie documental a cargo de National Geographic que en esta ocasión presentó un recorrido por la trayectoria del músico Andrés Calamaro.
Casi un mes más tarde estuvo disponible la primera serie de ficción nacional de su catálogo, la comedia dramática «Terapia alternativa», con dirección de Ana Katz y los reconocidos Benjamín Vicuña, Eugenia «China» Suárez y Carla Peterson en los papeles principales.
En distintas etapas de producción tiene más de una decena de títulos: en el extenso listado sobresalen «Santa Evita», basada en la novela de Tomás Eloy Martínez con el protagónico de Natalia Oreiro; «Diciembre 2001», inspirada en los críticos acontecimientos ocurridos en el país durante esa época; y «Limbo… hasta que lo decida», serie con la española Clara Lago encabezando un reparto de figuras argentinas que tomó trascendencia con su participación en el certamen francés CanneSeries.
También habrá series biográficas sobre Ringo Bonavena, Guillermo Coppola y Ricardo Fort, y una comedia protagonizada por Guillermo Francella titulada «El encargado», sobre un portero chusma que espía a los inquilinos del edificio en el que trabaja.
Disney+ continúa la tradicional producción local que históricamente tenía la señal Disney Channel y, tras el estreno hace semanas de «Entrelazados», prepara para el año próximo las tiras juveniles «FreeKs» y «Tierra incógnita».
HBO Max desembarcó con «Entre hombres», el policial negro basado en la novela de Germán Maggiori, y «Días de gallos», que apostó por aprovechar la ola de la música urbana y especialmente de las batallas de freestyle en la región con un elenco juvenil que encabezaron el trapero Ecko y Ángela Torres.
Para los próximos meses ya esperan la docuserie «Bilardo, el doctor del fútbol», que sigue la historia del entrenador que de la mano de Maradona llevó a la Selección Argentina a dos finales mundiales consecutivas; «María Marta: el crimen del country», sobre el caso que sigue apasionando a la opinión pública y que tendrá a Laura Novoa como García Belsunce y a Jorge Marrale como Carlos Carrascosa; y la tercera temporada de la policial «El jardín de bronce», como siempre con Joaquín Furriel.
Por el lado de Amazon, y a la espera de concretar una segunda temporada de la serie sobre Maradona, ya fueron anunciados numerosos títulos creados por artistas locales.
Estos son «Supernova», dirigida por Ana Katz y que también se verá por El Nueve, «Iosi, el espía arrepentido», thriller de ocho episodios con dirección de Daniel Burman y Sebastián Borensztein y elenco de figuras como Mercedes Morán y Natalia Oreiro; «El fin del amor», basada en el best-seller de Tamara Tenenbaum con el protagónico de Lali Espósito; y «Porno y helado», comedia policial creada por Martín Piroyansky en la que tuvo una participación Susana Giménez.
También coproducida por Amazon Studios -y que podrá verse en la plataforma luego de su estreno en cines-, estará «Argentina, 1985», la nueva película de Santiago Mitre, que relata el histórico juicio a las Juntas militares con Ricardo Darín y Peter Lanzani en los roles de los fundamentales fiscales Julio César Strassera y Luis Moreno Ocampo.
Así todo, la amplia nómina de previsiones permite avizorar un recrudecimiento en la encarnizada lucha de las plataformas por destacar unas sobre las otras de cara a una audiencia que ya no tiene únicamente opciones extranjeras para «maratonear».
Queda por verse si el nivel de inversión se sostiene o hasta aumenta en el tiempo, si se genera trabajo para elencos y técnicos de manera constante y previsible, y que todo redunde en que Argentina se convierta, por fin, en un polo generador de contenidos para el mundo.