Tras idas y vueltas con sus aliados María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta, el presidente Mauricio Macri dio por hecho el traspaso de las empresas de energía eléctrica Edenor y Edesur a la órbita de la provincia y la ciudad de Buenos Aires, lo que implica, más allá de la discusión política, un complejo mecanismo jurídico, técnico y económico.
«Le estamos traspasando Edenor y Edesur a la provincia de Buenos Aires porque es más justo, porque es la manera de ir equilibrando el gasto estatal para que el Estado no se vuelva una mochila», apuntó Macri, tras varias semanas de negociaciones, que también incluyen el traspaso del control del transporte metropolitano, algo que no está cerrado.
«Hay un reclamo lógico de las provincias sobre los subsidios que recibe la provincia y la Ciudad de Buenos Aires, porque es cierto por política del Gobierno kirchnerista había un gran desfasaje y es por eso que las tarifas han subido más en Buenos Aires que en el interior para que se reconozca el verdadero valor de la energía», dijo el Presidente a radio Cadena 3.