El diputado nacional Facundo Manes, acompañado por el senador nacional Alfredo Cornejo, ambos radicales en Juntos por el Cambio (JxC), encabezó hoy un acto en una plaza de La Plata y planteó que «la única manera» que tiene la UCR «de convertir la tristeza en esperanza» es con «empatía».
La recorrida por la capital bonaerense se inició hoy por la mañana cuando fue recibido por el presidente de la Universidad Nacional de La Plata, Martín López Armengol, y el vicepresidente Académico, Fernando Tauber, para articular una agenda de trabajo conjunta y formalizar vínculos institucionales con eje en la educación dado que el legislador nacional es presidente de la comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados de la Nación.
La agenda continuó con una charla abierta en el Auditorio del edificio «Sergio Karakachoff» y concluyó con un acto en la Plaza Belgrano, actividad a la que se sumó el senador Cornejo; el presidente de la UCR bonaerense, diputado provincial Maximiliano Abad, y autoridades locales.
«Algunos de nosotros hemos tenido experiencia de gobierno, pero necesitamos comprometer a gente que no estuvo en la actividad política de lleno, pero que tiene compromiso por el país; y por eso me entusiasma Facundo», indicó Cornejo.
Cornejo elogió a Manes: «Desde su trayectoria, desde su perspectiva profesional y como emprendedor quiere darle una mano a la Argentina», dijo.
El senador mendocino señaló que ambos están comprometidos «con un proyecto colectivo por la Argentina» y resaltó que lo quieren «hacer desde el partido radical y en JxC para que Argentina tenga alternancia».
Manes, por su parte, devolvió la gentileza y señaló que el exgobernador «representa el ejemplo que el radicalismo puede gobernar y hacerlo muy bien como lo hacen en Mendoza».
«No entré en esta actividad desgastante y muchas veces, como vemos ahora, violenta para nadar con la corriente, sino para nadar contra la corriente y con ustedes», señaló Manes, y agregó que comenzó a participar en política «porque es la mayor herramienta de transformación social».
Manes recorre el país con la consigna de ser más empáticos y, en ese marco, planteó que el partido tiene «el desafío histórico de convertir la tristeza en esperanza» e indicó que «la única manera de hacerlo es con empatía, una habilidad para entender que el otro puede pensar diferente».
Sobre el final indicó que «las diferencias que puede haber en el arco político son menores frente al desafío enorme que tenemos de reconstruir esta Nación» y llamó a los presentes a «dejar de ser espectadores de la decadencia crónica y a ser protagonistas de una Argentina que encare el progreso, la modernidad y los desafíos del siglo XXI».