El número de inmigrantes y refugiados que atravesaron el Mediterráneo desde el pasado 1 de enero alcanzó los 101.210, menos de la mitad de los que consiguieron llegar por mar hasta Europa en el mismo periodo del año pasado, dijo hoy la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
En lo que va del 2017, Italia es el principal país de llegada de los inmigrantes.
Este país recibió en los seis primeros meses de este año a más de 85.183 inmigrantes, seguido de Grecia, a donde llegaron 9.290, invirtiendo completamente la tendencia de 2016.
El año pasado lograron desembarcar en las costas de las islas griegas 158.527 inmigrantes, mientras que a las de Italia habían llegado 71.279 personas.
Una de las principales razones para este cambio es que Turquía fue el país de partida más utilizado por los que se dirigían a Grecia, pero las salidas de embarcaciones con inmigrantes cayeron fuertemente tras un acuerdo alcanzado por el gobierno turco y la Unión Europea (UE) en marzo de 2016 para frenar el flujo migratorio.
Las llegadas por mar a España también se incrementaron considerablemente en lo que va del año, pasando de más de 1.300 a más de 6.400.
Las estadísticas de la OIM también consideran los muertos registrados en las tentativas de cruzar el Mediterráneo, en la mayoría de los casos de Libia hasta Italia, una ruta en la que perdieron la vida 2.501 personas desde inicios del año.
Entre los que se dirigían a Grecia hubo 376 muertos y 86 en la travesía hacia España, totalizando hasta ahora 2.963 víctimas mortales, consignó la agencia de noticias EFE.
Ello representa una subida de la mortalidad en el Mediterráneo, si se compara con los 2.247 muertos entre el 1 de enero y el 3 de julio de 2016.