El diputado nacional Sergio Massa aseguró hoy que «la educación no es un botín de guerra político» y pidió «bajar la violencia y buscar el diálogo verdadero» entre el Gobierno y los docentes «en una mesa» que debe «empezar ya» en «el Congreso, donde se encuentran todas las visiones e ideas de la Argentina», e instó al Ejecutivo a «dejar de hacer política con el conflicto».
En un texto publicado en su perfil de Facebook, el líder del Frente Renovador se refirió al operativo policial que anoche impidió que los gremios docentes instalaran una escuela itinerante frente al Congreso y señaló que «un país no puede avanzar así. Vemos un espectáculo patético, mientras la sociedad mira triste, atónita, cansada de escuchar agresiones, denuncias, descalificaciones y peleas».
«No podemos seguir dándole a los más chicos el mensaje de que su futuro se resuelve con marchas y contramarchas, escupitajos, trompadas, piquetes y paros. No podemos seguir con los alumnos y las escuelas rehenes de una pelea de facciones políticas que buscan mostrar quién es más poderoso», agregó.
Para Massa, «es tiempo de bajar la violencia y buscar el diálogo verdadero» entre «Gobierno, sindicatos, oposición, empresas y padres, y ponerse a construir la educación del siglo 21».
El legislador afirmó que «es tiempo de hablar francamente del presentismo, de los salarios, del estado de las escuelas, de la tecnología como nuevo actor en el proceso educativo».
Además, llamó a «acordar cuatro puntos centrales» que identificó como «inversión en porcentaje del producto en Educación», un «modelo educativo para el siglo 21», la capacitación docente y una «nueva relación de la comunidad educativa».
Massa sostuvo que esa mesa de diálogo «debe empezar ya, ayer, en el Congreso, donde se encuentran todas las visiones e ideas de la Argentina» y exigió que el Gobierno «tiene que dejar de hacer política con el conflicto».
«Tenemos que terminar de una vez por todas con esta pelea que tiene a los chicos de rehenes. Terminemos con la Argentina de las chicanas, de la división, de la extorsión y de los paros», concluyó.