El diputado nacional Máximo Kirchner advirtió hoy que el modelo económico del presidente Mauricio Macri «solo va a cerrar con represión», al participar de un plenario de militantes en Ensenada, con el que Unidad Ciudadana pareció iniciar la carrera electoral de cara a las presidenciales de 2019.

Con fuertes críticas a la marcha económica del Gobierno, varios párrafos dedicados a la gobernadora María Eugenia Vidal, y una defensa a los funcionarios acusados por casos de corrupción, Kirchner cerró el denominado «Plenario de la Militancia», el primer encuentro de varios que la fuerza pretende realizar para organizarse como alternativa política para el año próximo.

El acto contó con la presencia de 21 intendentes del Conurbano (se destacó la presencia de Martín Insaurralde y Verónica Magario, entre otros, y la ausencia del presidente del PJ, Gustavo Menéndez), y de los sectores incondicionales del kirchnerismo. Durante la jornada se rumoreó que la senadora Cristina Kirchner podía participar del plenario, un dato alentado por el sector cercano al intendente local Mario Secco, pero desmentido por los principales voceros del Instituto Patria.

En el cierre del encuentro, Máximo Kirchner sostuvo que «este modelo económico está agotado y solo va a cerrar con represión», y asoció esa situación con el reciente decreto de Mauricio Macri de «reorganización» del ejército: «Por eso el Presidente tiene la brillante idea de disponer que las Fuerzas Armadas actúen en seguridad interior. Desde acá hay que pedirle a los hermanos y hermanas que trabajan en las fuerzas de seguridad que no vayan contra su propio pueblo», indicó.

En ese marco, vinculó la muerte de Santiago Maldonado con la represión de Gendarmería, y comparó este hecho con otros del gobierno de sus padres, Néstor y Cristina Kirchner. «Yo lo ví a (el ruralista Alfredo) De Ángeli, cortar la ruta durante 100 días y ahora es senador, y Maldonado dos días que cortó la ruta y terminó en el fondo del río. La Argentina nuestra era libre, democrática y plural», sostuvo.

El discurso de Máximo Kirchner estuvo fuertemente cruzado por un crítico análisis de la situación económica del país. Incluso leyó un libro para y dio cifras de la economía mundial para compararla con la de Mauricio Macri. En ese marco, se preguntó «¿de qué sirve el déficit fiscal 0? Lo único que logra es la paz de los cementerios. Los números tienen que cerrar con la gente adentro».

Al finalizar, y como mensaje a la militancia, el diputado nacional pidió «empezar a discutir un frente lo más amplio posible, que incluya a todos. Tenemos que tener la mayor generosidad política para que ese frente pueda cumplir con la gente».

En su discurso de 45 minutos, Máximo Kirchner dedicó varios pasajes a la provincia de Buenos Aires, alimentando las versiones sobre una posible candidatura bonaerenses para el año próximo.

El diputado nacional (hoy electo por Santa Cruz) comparó la coparticipación recibida por la Provincia con la de Capital Federal, e hizo lo propio con los presupuestos que ambos distritos destinan a salud y educación.

Pero en otro apartado hizo una cruda caracterización de la gobernadora María Eugenia Vidal, a quien calificó de «miserable» e «hipócrita». «Miren lo que pasó en Moreno. En octubre, justo en las elecciones del año pasado (y esto es para que aprendamos todos lo que puede ocurrir con las miserabilidades de la política) por sacarle al intendente el consejo escolar, dos trabajadores de la educación volaron por los aires cuando le estaban preparando la leche a los alumnos. Hay que pedirle que abandone la hipocresía y que le cumpla a su pueblo».

En la previa al acto central, los militantes de Unidad Ciudadana participaron de 14 mesas de discusión, distribuidas en diferentes puntos de la localidad. Del cierre, realizado en el polideportivo municipal, participaron unas 15 mil personas.

Entre los presentes se pudo ver al exsecretario de Legal y Técnica Carlos Zannini , el exsecretario general de la Presidencia Oscar Parrilli, el exgobernador de Entre Ríos Sergio Urribarri , el titular de Nuevo Encuentro, Martín Sabbatella, y los diputados Agustín Rossi, Axel Kicillof, Fernando Espinoza, Eduardo «Wado» De Pedro y Andrés «Cuervo» Larroque. También estuvieron los intendentes de la Matanza, Verónica Magario, y de Avellaneda, Jorge Ferraresi.

Aunque ninguno de los protagonistas mencionó la causa de los «Cuadernos de la Corrupción», hubo durante toda la jornada una fuerte defensa de los exfuncionarios K detenidos por diferentes causas. En el acto se leyeron cartas del exministro de Planificación, Julio De Vido (preso en el penal de Marcos Paz), y del exvicepresidente Amado Boudou, condenado esta semana por la expropiación de la imprenta Ciccone Calcográfica. También se emitió un mensaje grabado por la dirigente jujeña Milagro Sala. Entre los presentes, en tanto, se encontraba el piquetero Luis D?Elía, quien semanas atrás aseguró que había que «colgar» a Macri.

Desde el escenario, Kirchner apuntó contra el Presidente y la Justicia al sostener que son «perseguidos» y que pueden hacer con ellos «lo que quieran».

«El emperador (en referencia a Macri) dice Cristina y hace así con el dedo (señala), y sale corriendo el partido judicial, con jueces que no han laburado nunca por el pueblo, y para mantenerse hacen eso y se ponen a disposición», señaló.

En otro pasaje, Máximo Kirchner realizó una dura crítica a un sector del peronismo, al sostener que «a veces cuando hay algunos que nos quieren venir a enseñar el peronismo, me pregunto si piensan que Perón estuvo 28 años haciendo Turismo en Puerta de Hierro o fue porque se había peleado con la oligarquía y lo habían metido preso».

«Que nos venga a correr con la vaina de la transpatencia un Macri, el socio de (el exintendente de Morón, Juan Carlos) Rousselot, el que contrabandeaba autos y fue salvado por la Corte de la mayoría automática?», indicó de forma irónica.