Si algo distingue a la apuesta de Canticuénticos en esta década de actividad es el animarse a tratar asuntos delicados porque, como dijo el guitarrista Daniel Bianchi, “es importante que es que el arte para niños se anime a abordar temáticas sociales complejas y difíciles”.
En ese terreno destaca la canción “Hay secretos”, incluida en “¿Por qué, por qué?” (2018) que sobrevuela el drama de los abusos (“No se tienen que guardar/los secretos que hacen mal/…/Si no alcanzan las palabras/para lo que hay que contar/inventemos otro idioma/siempre te voy escuchar/”).
Al repasar momentos claves en el tránsito del grupo santafesino, el músico indicó a Télam que “nuestro primer e innegable hito fue la aparición del video de ‘La cumbia del monstruo’. A partir de una producción modesta, usando una plataforma alternativa, nuestra música llegó a los lugares más impensados”.
Bianchi también citó como pasajes centrales a las salidas de cada uno de los álbumes y “la aparición de los ‘Canticuénticos en Papel’ al llevar las canciones al terreno de lo visual, y explorar un universo desconocido, de la mano de Estrellita Caracol y su hermosa estética, con la que nos sentimos muy identificados”.
Frente a semejante despliegue de actividades, Ruth Hillar apuntó a esta agencia que la posibilidad de reinventarse “es una sensación que tengo desde después del primer disco, pero ya transitando el armado del segundo pensé que así como el universo es infinito, infinitas son las posibilidades al componer, arreglar, poner en escena un espectáculo”.
“Y en estos diez años fuimos aventurándonos por lugares nuevos pero teniendo siempre presente una estética y un modo de hacer las cosas que sigue definiéndonos. Cuando miramos para adelante, se abren cantidades de posibles caminitos y sobran proyectos, ideas y ganas”, abundó la artista.