La Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata realizó hoy un festival orientado a incentivar a los alumnos del último año del colegio secundario en el estudio de Ingeniería y a derribar el mito de que la matemática es una materia difícil o poco entretenida.
Stands con competencias sobre desafíos matemáticos, demostraciones interactivas y muestras de robótica y drones fueron algunas de las propuestas del encuentro que se desarrolló en la casa de estudios platense, ubicada en las calles 1 y 47.
En el denominado «Festival Mate Pi», los profesores mostraron cómo aplican los ingenieros las matemáticas y realizaron actividades destinadas a que los alumnos respondan, de manera grupal, consignas relacionadas con Conjuntos numéricos, Área y volumen, Cuadrado y cubo de binomio, radian y circunferencia, Teorema de Pitágoras y el número Pi.
También se llevaron a cabo desafíos matemáticos mediante competencias de preguntas y repuestas, por los que obtenían como premio reglas, lapiceras, pines, llaveros del símbolo Pi y bolsos de la Facultad.
La profesora Rossana Di Domenicantonio, a cargo de la cátedra Matemática para Ingeniería, contó que «la idea del festival es lograr que los alumnos le pierdan el miedo a la matemática al verla de manera tangible y cercana» y apuntó que «no sólo la necesitan para estudiar carreras tecnológicas, sino para otras también».
La profesional detalló que en los stands dispuestos en el patio de la Facultad «las diferentes carreras mostraron distintos fenómenos donde se ve que la matemática está detrás».
Graficó que «Ingeniería Hidráulica mostró un fenómeno con el agua en el que se necesita usar la matemática; Ingeniería Agrónoma una medición con una estación total e Ingeniería Electrónica demostró que para mantener el equilibrio con robots hay un algoritmo matemático detrás».
«En síntesis, se trató de visibilizar cómo se usa la matemática para resolver o crear cosas», dijo.
En esa línea, el decano Horacio Frene, dijo que el Festival surgió de una política institucional orientada a difundir «lo que es anterior al ingreso» y agregó que se busca «derribar mitos, dar a conocer las competencias que generan las carreras tecnológicas e ingenierías, y achicar la brecha entre la Facultad y el secundario en cuanto a contenidos y conocimiento».
«Los mitos señalan que Ingeniería no es para mujeres, que las carreras son sólo accesibles para cierta capacidad cognitiva; y que la matemática es difícil o un filtro; y no es así», subrayó.
Frente aseveró que «hoy buscamos demostrar que las matemáticas son difíciles si uno las trata de aprender como una receta, pero si las visibiliza asociada a la necesidad de hechos concretos pueden ser más comprensibles».
«Si explico que un camión puede o no ingresar a un túnel mediante la superposición de figuras geométricas -lo que sería logística en Ingeniería- hago que sea algo palpable. Si explico cómo conectar una lamparita en una casa desde variables físicas será más abstracto que si lo hago mostrando cables, cañitos y un portalámpra», finalizó.
La docente Adriana Lemos y su alumna Ivana Améndola contaron que desarrollaron para la Feria una trivia con preguntas sobre películas «para acercar a los chicos a la carrera desde un lado más lúdico y divertido» y sostuvieron que «todos se engancharon re bien con la propuesta».
«Les preguntamos si creen que el Titanic se hundió por el impacto con el iceberg, porque el acero no era apto, por las temperaturas del mar o todas las anteriores (la respuesta es ‘todas las anteriores’) y después les dimos explicaciones sobre eso», remarcaron y añadieron que «otra pregunta era si creían que Jack y Rose entraban en la tabla (la respuesta es que sí)».
Walter Muricengo, José Romano y Jorge Paredi, profesores de Ingeniería en Agrimensura, exhibieron instrumental que se utiliza para mediciones, drones para vuelos de baja altura, un nivel y una estación total.
«La idea es que los chicos de secundario vieran la teoría matemática aplicada a la práctica y así desmitificar que es algo abstracto y duro, demostrando que tiene aplicaciones concretas», dijeron.
El ayudante Pedro Morsillón, a cargo de un stand donde los estudiantes competían con dados para armar la mayor cantidad de conjuntos numéricos posibles, dijo que «los estudiantes se entusiasmaron mucho con la idea y fijaron conceptos que quizá no recordaban del colegio».