El ex gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, no confirmó una eventual postulación por el peronismo en las próximas elecciones de octubre pero consideró que «cualquier candidato que quiera competir tiene que ir a las PASO», en referencia a las primarias obligatorias.
En una entrevista con radio Rivadavia, el ex vicepresidente de la Nación elogió varias medidas del presidente Mauricio Macri pero se mostró más cerca del «gradualismo» y dijo que está «con ganas de servir al país y de poder ayudar».
«Estoy pensando en la Argentina y no en las elecciones», dijo Scioli consultado sobre si se postulará en octubre, y afirmó que «se verá en su momento» si es «útil desde una banca», al tiempo que confirmó que «cualquier candidato tiene que ir a un proceso de las PASO», incluso dentro del peronismo.
Sobre su partido, el justicialismo, justamente reclamó «hacer autocrítica, interpretar las nuevas demandas de la sociedad, actualizar nuestra doctrina y generar confianza y fe en la sociedad» y consideró que esa es la verdadera política «y no ir a una candidatura».
También en materia política señaló que «la oposición tiene que acompañar a un oficialismo que también sea responsable y tenga la amplitud para interpretar y gobernar para los 40 millones de argentinos».
«Acá estoy, con ganas de servir al país y de poder ayudar», dijo cuando le preguntaron en qué estaba trabajando y tras la difusión de una eventual candidatura bonaerense del ex ministro del Interior Florencio Randazzo en el justicialismo.
En la entrevista Scioli evitó confrontar tanto con el kirchnerismo como con el gobierno actual y recordó que con el presidente Mauricio Macri tiene «una relación de mas de 30 años en lo personal» y elogió «la calidad humana y política» del ministro del interior Rogelio Frigerio, que había calificado el fin de semana como «una buena idea» la posibilidad de convocar a peronistas para sumar a la gestión.
«Si me llama Frigerio a una reunión voy, nunca dije que no», señaló Scioli.
«Tenemos que poner todos los esfuerzos y el hombro, esto le va a dar mejores expectativas a la gente», sostuvo el ex gobernador, que se calificó como «un hombre con un profundo compromiso con Argentina y con la voluntad de ser parte de las soluciones» del país.
«Nunca le saqué el pecho ni antepuse una cuestión personal», agregó.
Consultado sobre el conflicto docente, respondió: «Me hago eco del documento de la Iglesia en cuanto a que ambas partes dejen de escalar confrontaciones».
Además consideró que es un fenómeno social porque «12 millones de chicos no van a las aulas» y como contrapartida señaló que «también es justo que los docentes reclamen por sus salarios y no pierdan poder adquisitivo», pero pidió no dejar la discusión en eso y que «también se hable de la calidad educativa, de las escuelas técnicas, los industriales».
No obstante, sostuvo que él «entiende a la gobernadora (María Eugenia Vidal), porque cada punto de salario que se negocia son miles de millones de pesos», en referencia al conflicto docente y su pelea salarial.