Con el objetivo de retomar la mesa de diálogo para bajar la tensión social, el Gobierno se reunió con las organizaciones sociales, y aunque no ofreció el pago de un aguinaldo de $ 3.000 para beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AHU), se comprometió a aumentar los planes sociales, algo que fue calificado como «insuficiente».

La ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, recibió a los líderes de las principales organizaciones sociales pero no cedieron ante el principal reclamo del medio aguinaldo. De todos modos y aunque no hubo acuerdo, los piqueteros dejaron planteados sus pedidos y aguardarán una respuesta oficial antes de volver a las calles.

De la reunión participaron los referentes de los movimientos Barrios de Pie, la Corriente de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y la Corriente Clasista y Combativa (CCC). Según trascendió, las autoridades de Desarrollo Social rechazaron el pedido de dinero y ofrecieron, en cambio, aumentar gradualmente los programas de empleo.

La principal diferencia entre las posiciones fue que, finalmente, el Gobierno decidió no ofrecer el bono de $ 3.000 por única vez que se barajaba. Las organizaciones lamentaron la respuesta de Stanley y consideraron que «las soluciones que el Gobierno ofrece a la agravada situación social son como ofrecer una aspirina para un escenario de enfermedad terminal».