Los gobiernos bonaerense y porteño comenzaron hoy a negociar el posible traspaso de la concesión de las eléctricas Edenor y Edesur a sus distritos, medida que es reclamada por gobernadores del PJ en el marco de la negociación por el ajuste de las cuentas públicas, y que supondría una importante erogación para ambas administraciones de Cambiemos.
La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se reunieron esta tarde con el Ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, junto a quien comenzaron a analizar los detalles presupuestarios de un eventual traspaso.
El traspaso de Edenor y Edesur a la órbita provincial y porteña es una de las principales condiciones que enarbolan los gobernadores del PJ para acompañar el Presupuesto 2019, que contendrá un fuerte recorte de los gastos públicos, lo que afectará a las provincias. Sin el apoyo de los mandatarios y de sus legisladores, la «ley de leyes» tiene destino de fracaso.
Los gobernadores exigen también el traspaso de Aysa, la empresa de agua y saneamiento, pero por ahora ese ítem quedó fuera de la mesa de negociaciones. Para los planes del Gobierno continuará bajo la órbita nacional, y en ese marco hoy se oficializó la adhesión de un nuevo municipio bonaerense, Pilar.
Según se informó, Vidal, Larreta y sus equipos técnicos y políticos avanzaron con Dujovne en el impacto que tendrá en las cuentas de sus distritos el traspaso de las empresas, ya que si ambas administraciones finalmente se hacen cargo del área de concesión deberán afrontar el peso de los subsidios.
Por ahora, desde el Gobierno no brindaron detalles del encuentro, pero se espera que en los próximos días haya un anuncio al respecto.
El reclamo de los gobernadores del PJ se materializó en mayo, a través de un proyecto presentado por los diputados nacionales Diego Bossio y Pablo Kosiner, que establecía el traspaso de Aysa, Edenor y Edesur. Algunos mandatarios incluso pidieron que Buenos Aires y Capital Federal se hagan cargo de los subsidios al transporte.
Frente a la embestida, Vidal inició una campaña de «solidaridad» con la dirigencia bonaerense, y sumó el apoyo de varios intendentes peronistas. Incluso el presidente de la cámara de Diputados, Manuel Mosca, recorre aún la provincia hablando sobre los perjuicios que traería la medida.