El presidente Mauricio Macri expresó hoy, ante funcionarios nacionales y gobernadores de Cambiemos, su convicción de que el año próximo la Argentina «va a confirmar que entendió que éste es el rumbo», que marca «un punto de inflexión en la historia» y ubica al país en el camino hacia «la igualdad de oportunidades».
«La sociedad argentina se está curando», enfatizó el mandatario al pronunciar un discurso durante la última reunión del gabinete ampliado del año, que se desarrolló en el CCK, ubicado a pocas cuadras de la Casa Rosada.
Allí, en un auditorio colmado de funcionarios, gobernadores, intendentes y legisladores del oficialismo, Macri les pidió que junten «fuerzas y toda la energía en familia» en esta Navidad y Año Nuevo, en el que -dijo- «la Argentina va a confirmar que éste es el rumbo, porque hay una Argentina muy madura, un núcleo de madurez y crecimiento muy importante de los argentinos».
«En Navidad, sin empacharse de sidra y turrón, y en Año Nuevo, juntemos toda la energía del mundo porque el año que viene es un año en que la Argentina va a confirmar que entendió que éste es el rumbo, porque hay una Argentina muy madura», sostuvo el mandatario en el auditorio del CCK.
En el cierre de un discurso que se extendió durante 25 minutos, Macri afirmó que, si se llegó hasta donde se llegó, «habiendo transcurrido lo que hemos transcurrido, es porque hay un núcleo de madurez y de crecimiento de los argentinos como nunca antes».
«Ellos están esperando que estemos fuertes, que les mostremos el camino y que, juntos, trabajando y poniendo el hombro, vayamos construyendo esta Argentina que tanto soñamos y que tanto nos merecemos», aseveró el jefe del Estado, con la mirada puesta en el 2019, un año signado por las elecciones generales fijadas ya para el 27 de octubre.
También, abogó para que el camino trazado por las políticas de su gobierno «sea el verdadero punto de inflexión en la historia de la Argentina, y que esta vez sí hayamos encontrado definitivamente el rumbo de la igualdad de oportunidades».
Por otro lado, valoró el respaldo que a nivel internacional tiene actualmente la Argentina, y sostuvo que eso quedó expresado en las afirmaciones de los líderes mundiales que participaron de la reciente Cumbre del G20, en la ciudad de Buenos Aires.
«El mundo quiere que la Argentina ocupe su lugar, porque cree que tiene que ser parte de la solución de los problemas globales y parte de los motores del mundo», señaló.
En otro orden, el Presidente reconoció que éste fue un año «difícil y traumático», y afirmó que todas las noches pensó y repasó si «había otra forma de resolver tantos problemas y tantas angustias», pero que, «como nunca antes» en su vida, estaba «cada vez más seguro de que el camino es por acá», y que no había otro sendero «que el que hemos tomado».
«Créanme que, cuanto más veo al mundo y camino la Argentina, más siento que estamos en un momento histórico, único, donde el límite va a ser solamente el que nuestra generosidad no llegue. Si todos los que estamos liderando contagiamos a todos los argentinos de ese espíritu de generosidad, el límite es casi infinito», postuló el jefe de Estado.
También, el Presidente sostuvo que «enfrentar los privilegios es salir de la comodidad» y agregó que eso «es muy duro» porque «los que tienen privilegios se han armado sus propios ejércitos de presión, ya sea mediática, judicial, rosquera, lo que sea, para que nadie le vaya a sacar lo que tienen, y pelean con las peores armas».
«Y, claro, en esa pelea uno está casi solo porque aquellos que nos votan y nos piden por favor, están trabajando para llegar a fin de mes para mover este país, y no pueden estar al lado nuestro; entonces en muchos momentos estamos solos, y te rodean físicamente, no sólo mentalmente, los edificios, te los toman, te toman las plazas, te arman líos, te putean y, cuanto más es el privilegio, más violentos se ponen. Pero no hay futuro si realmente no tenemos una sociedad donde haya verdadera equidad», postuló el mandatario.
En otro tramo de su discurso, Macri sostuvo que, «todo esto» que están haciendo desde la función pública, en la gestión de Cambiemos, «se trata del amor», pidió a los funcionarios que junten «energías» en estas fiestas de fin de año.
En ese momento, el Presidente dio espacio a la broma: «No todos tenemos la suerte de volvernos a casar como (el gobernador de Jujuy, Gerardo) Morales en este momento, que está hecho un ‘pendejo’ y parece que descubrió la vida, lo cual, bienvenido al club de entender que, al final del día, el verdadero poder sobre casi todo lo que pasa en este mundo lo tiene la mujer».