El presidente de la Corte Suprema de la Nación, Carlos Rosenkrantz, admitió que “los argentinos están perdiendo la confianza en el Poder Judicial”, pero afirmó que “estamos a tiempo de revertir esa crisis de legitimidad” si se respetan “puntillosamente” las reglas.
“Estamos frente a un desafío porque la legitimidad es esencial”, remarcó Rosenkrantz en el cuarto piso del Palacio de Tribunales, al exponer en la apertura del año judicial.
«Creo que con la capacidad de nuestra gente es posible encontrar una solución”, agregó el magistrado.
El presidente de la Corte Suprema subrayó que “ser jueces no es un privilegio” sino que “estamos para servir a la ciudadanía con el derecho”, al disertar ante los restantes miembros de la Corte, el ministro de Justicia, Germán Garavano, y magistrados federales de distintos fueros de todo el país, entre ellos, casi en pleno, los de la Cámara de Casación.