La gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, acusó anoche al peronismo de no combatir el narcotráfico en esa provincia durante casi 30 años y afirmó que en el actual gobierno de Juntos por el Cambio «no hay impunidad para nadie, incluso el presidente (Mauricio Macri) y su familia».
La mandataria argumentó su deseo de ser reelecta y señaló metafóricamente que la provincia es como otro hijo para ella: «Cuando uno quiere a un hijo y tiene uno más no lo abandona», aseveró.
«Sé todo lo que falta, como sacar a los narcos y las peleas que hay que dar para que la droga no llegue a nuestros hijos, cuánto hay que trabajar en los hospitales. Quiero que la provincia crezca y mejore, y eso va a ser mejor para los hijos biológicos, que quiero que se queden en este país. No hay salida posible para el país sin la provincia», enfatizó Vidal.
La gobernadora, por América TV, destacó que personalmente se pone al frente de esa lucha y dijo que «en Villa Itatí (Quilmes) vi como vendían drogas y he hecho la denuncia; lo mismo en Puerta de Hierro, La Matanza, y Costa Esperanza, en San Martín».
«Hay que sacar al que vende, al que repone, al que trae la droga, y me gusta tener la pelea de cerca», enfatizó la mandataria. En ese sentido insistió con que «no hay narcotráfico sin complicidad política, jurídica y policial. No le pongo nombre y apellido, pero hubo un sistema que gobernó la provincia durante 28 años y crecían las ‘cocinas’, el paco, el consumo de drogas. O no supieron, o no quisieron o no pudieron enfrentarlo».
«Hubo un sistema que a esa pelea no la dio, y nosotros la seguimos dando todos los días», remató.
Tras señalar que «no lo he escuchado expresarse» sobre el narcotráfico a su rival peronista, Axel Kicillof, Vidal destacó que en su gestión hubo «70 % más de paco decomisado, que no llega a los chicos, y lo mismo con la cantidad de detenidos».
El ex gobernador Daniel «Scioli detuvo a 5.000 personas desde 2008, y nosotros 7.000 en tres años», ejemplificó también.
La gobernadora abordó nuevamente la polémica que produjeron las declaraciones del presidente de la Corte bonaerense, Eduardo De Lázzari, quien advirtió que habría causas «armadas» y que hay un «abuso» del proceso judicial penal.
«En este gobierno no hay impunidad para nadie. Todos somos iguales ante la ley, incluso el presidente (Macri) y la familia del presidente; vamos y nos presentamos a la justicia, damos la cara», afirmó.
Agregó que «en tres años y medio nunca tuvimos un conflicto de poderes en la provincia y no lo vamos a tener ahora; ante declaraciones graves (de De Lázzari) dije que si esto está pasando lo denuncie como máxima autoridad, ya que hay una responsabilidad institucional para que se demuestre si es verdad o no».
Vidal sostuvo además que «esta campaña no es para que los dirigentes políticos hablen de otros dirigentes y menos de su vida privada». Consultada sobre alusiones de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner a su vida particular, se preguntó «cuál es el delito de tener un amante, si lo tuviera».
«No está en juego eso; no tenemos que hablar de los demás o de nosotros, sino de qué hicimos con los bonaerenses cuando gobernamos o queremos gobernar, qué provincia le dejaron a los bonaerenses en 28 años», amplió.
También se refirió a la intendenta de La Matanza y candidata a vicegobernadora, Verónica Magario, específicamente a no permitir el ingreso del SAME a esa comuna.
«El SAME no es de Magario ni mío, es de los bonaerenses. Se hace con recursos de los bonaerenses, no tiene costo (para la comuna), ya que todo lo paga la provincia. Ellos tienen un servicio pero no para todo el partido; podríamos llegar a las zonas que ellos no llegan. Y hasta el 10 de diciembre Magario es intendenta. Tenemos el SAME a su disposición, necesitan una ordenanza municipal nada más», describió.
Respecto del señalamiento que le hizo Kicillof acerca de que ella se dedica a «juntar» votos para Macri, Vidal replicó: «Los votos no se juntan, los bonaerenses eligen». Y destacó que estuvo varias veces en «cada uno de los 135 municipios».
Sobre la cuestión laboral, dijo que su administración resolvió varios conflictos: «En cada uno hemos estado presentes», dijo. Y resaltó la creación de trabajo de parte de su gobierno, al ejemplificar que «cada obra de Metrobús lleva 400 trabajadores, y hemos hecho más de 2.000 obras en la provincia».