El viceministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, afirmó hoy que es un «desafío» controlar los posibles contagios en colegios de cara al inicio del ciclo lectivo, pero resaltó que el Gobierno está «comprometidísimo con la recuperación de la presencialidad».
En declaraciones a radio El Destape, el funcionario se refirió al retorno a las clases presenciales y explicó que «cualquier actividad masiva que movilice mucha gente aumenta contagios» de Covid-19.
En ese marco, planteó que «no hay ninguna razón para pensar que una actividad con muchas personas y en un lugar cerrado no va a afectar a los contagios».
«Tenemos 3 millones y medio de estudiantes. Los contagios aumentarían aún si las escuelas fueran estériles, sólo por el movimiento», completó y analizó si bien el Gobierno de Axel Kicillof está «comprometidísimo con la recuperación de la presencialidad, no desconoce» que ésta se da en un contexto de pandemia.
Sostuvo que frente al proceso de vacunación, «no es lo mismo como estamos ahora que como pensamos estar en dos o tres meses, por lo que hay que hacer todo con mucho cuidado, pensando en los chicos y trabajadores, con protocolos y mucho rigor, con vigilancia activa, aislamiento como hicimos con equipos de salud y en la industria».
“Si vemos que está pasando algo que perjudique seriamente la condición epidemiológica hay que tomar decisiones que controlen la cantidad de casos», precisó remarcó que «si tenemos que llegar a retroceder en lo educativo o en otra actividad, no será una derrota sino lo necesario para seguir adelante».
Por otro lado, Kreplak planteó que «hace 2 semanas que empezamos con la vacunación a docentes como prueba piloto».
Contó que «entre ayer y hoy llegaron 135.000 vacunas a la provincia, que serán distribuidas a 170 hospitales, 170 escuelas y 40 puntos del IOMA».
Explicó que en esos centros de salud se vacuna de lunes a lunes de 8 a 20, detalló que entre jueves, viernes, sábado y domingo se otorgaron 95 mil turnos y planteó que se vacunarán a 120.000 personas «en los próximos días» .
«Quedan alrededor de 30.000 trabajadores de la salud para vacunar y luego siguen los mayores de 70 años y los docentes con alguna comorbilidad», apuntó.