El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, anunció hoy que construirá 12 mil plazas en las cárceles de la provincia y afirmó que su administración hará «una verdadera transformación del sistema penitenciario» para que «estar preso deje de ser una tortura» y las personas cumplan la condena «en un camino hacia la reinserción social».
El mandatario formuló declaraciones al encabezar el inicio de las obras del Plan de Infraestructura Penitenciaria junto a los ministros nacionales del Interior, Eduardo «Wado» De Pedro, y de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, y el ministro de Justicia bonaerense, Julio Alak.
En el acto, que se desarrolló en Merlo, el gobernador dijo que asumió en 2019 en el marco de una crisis «en lo productivo, lo social, la seguridad y también una crisis humanitaria, de acuerdo a las Naciones Unidas en el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB)».
«Teníamos la sobrepoblación más grande de la historia: 24 mil plazas y 52 mil internos en condiciones de hacinamiento e infrahumanas, cuando el sistema penal indica que la gente que va presa, lo hace para poder después reinsertarse en la sociedad», continuó Kicillof, y apuntó que, para ello, «no se puede vivir en condiciones animales».
«Hacía meses que no se pagaban los alimentos ni los remedios, por lo que había huelga de hambre de 16 mil personas», rememoró, y afirmó que su gobierno decidió «solucionar de fondo el problema, lo que requería muchas acciones y mucha plata».
«Para resolver esa cuestión y para que las cárceles no fueran universidades del delito, había que hacer una ampliación importante del SPB. Eso era conseguir miles de millones de pesos, terrenos, hablar con intendentes. Trazamos un plan que era difícil, pero hoy estamos convirtiendo en realidad el plan de infraestructura penitenciaria más grande de que se tenga memoria», aseveró el gobernador.
«En 4 años, el gobierno anterior construyó 1.100 plazas nuevas. Nosotros, en dos años y con pandemia, hicimos 2.200 plazas. En los próximos dos años haremos 12 mil plazas penitenciarias», adelantó. Y reflexionó que ello «forma parte de un plan denominado 6×6: a 6 años de crisis vamos a responder con 6 de recuperación y transformación de la provincia».
«Pasar por una cárcel o cumplir una condena no debe ser caer en una nueva condena. Después de infligir la ley, debe caer todo el peso de la ley (sobre quien cometió el delito), pero una vez que las penas se cumplen, debemos darle oportunidades para tener une nueva vida», dijo y expresó que por ello el ministro Alak impulsa programas de estudio y talleres en las cárceles.
Katopodis expresó que «gobernar es fijar prioridades y el presidente fijó una, puso los recursos y la decisión política que permite esta importante inversión en la provincia de Buenos Aires».
«Son obras que tienen como objetivo dar un paso en una deuda que tiene la Argentina, que es cómo construimos un sistema penitenciario, de seguridad y de justicia que devuelva a los vecinos un poquito de tranquilidad», apuntó.
Sostuvo que «es decisión del presidente y la vicepresidenta llevar adelante el plan más grande de la Argentina, a pesar de que algunos sectores dejaron al país sin presupuesto porque la decisión es ejecutar cada una de las obras en cada rincón».
«Vamos a seguir por ese rumbo, no nos vamos a desviar. Ese presupuesto era la herramienta en esta bisagra en la que dejamos atrás un tiempo de dolor y angustia para entrar en tiempo de mayores certezas, una Argentina que de a poco se ordena y pone en marcha», continuó.
Katopodis remarcó que «ya recuperamos todo lo que perdimos en la pandemia y ahora que estábamos empezando a recuperarnos de lo que perdimos entre 2015 y 2019 no se votó el presupuesto, pero acá estamos con la firme voluntad de llevar adelante estas obras y seguir reafirmando el rumbo, con correcciones, modificaciones y matices, pero siempre con el mismo rumbo».
«La gente pide trabajar sin descanso por sus problemas. Hoy estamos con el gobernador, dando un paso imp para llevar tranquilidad a cada rincón de la provincia», cerró.
Alak recalcó que «estamos lanzando el plan de infraestructura penitenciaria más grande de la historia de la provincia» y analizó que ello responde «a un trabajo enorme de todos los estamentos del Estado».
«Kicillof vio el problema antes de asumir y prontamente tomó el toro por las astas. Asumimos con la sobrepoblación más grande de la historia, con 54 mil internos y 24 mil plazas; había huelga de hambre, intervinimos y se solucionó en 10 días», rememoró y agradeció al presidente «que vio que había que resolver esta problemática y ayudó a la provincia».
Desde el Poder Ejecutivo se precisó que el Plan de Infraestructura Penitenciaria 2022-2023 prevé la construcción de 20 grandes obras en el conurbano bonaerense, 5 unidades para mil internos y 15 alcaldías de 320 internos con un total de 10 mil plazas
A este plan se suman las 2.000 plazas construidas en el período 2020-2021, con lo que se llegará a la construcción de 12.000 plazas en 4 años, que se sumarán a las 24.000 que se construyeron en la Provincia en sus 200 años de existencia.
Se remarcó que el plan tiene como objetivos principales «disminuir la enorme sobrepoblación heredada del gobierno anterior en cárceles y comisarías y mejorar la seguridad ciudadana, permitiendo que la policía esté en el espacio público haciendo prevención del delito y no cuidando presos».
Concretamente hoy se dio inicio a las obras de construcción de 2 Unidades en Merlo y 5 Alcaldías en Berazategui, Almirante Brown, Lomas, Merlo y Escobar financiadas con fondos provinciales y se firmó el convenio con el Ministerio de Obras Públicas de la Nación para la transferencia de fondos a la Provincia para la construcción de 3 Unidades en Moreno, Mercedes y Florencio Varela y 10 alcaldías en Moreno, Tres de Febrero, Tigre, La Plata, Hurlingham, Morón, La Matanza, Ezeiza, Lanús y Quilmes.
Participaron además la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez; el intendente en uso de licencia Gustavo Menéndez y su reemplazante, Karina Menéndez, y el jefe comunal de Tres de Febrero, Diego Valenzuela.