El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, destacó hoy la «unidad» de la coalición oficialista Unión por la Patria (UxP) y advirtió que la elección de octubre es «decisiva».
«Hubo un esfuerzo para llegar a la unidad. A esta PASO la llamo ‘de unidad’ porque no hay discusión de nombres», dijo Kicillof, aunque aclaró que esa cohesión «expresa distintas miradas, con candidatos competitivos».
El mandatario provincial afirmó que UxP tiene una «boleta competitiva, que se puede defender, que nos da espacio para contener a todos los sectores».
Así se expresó durante una entrevista en el canal de streaming Somos Gelatina, que incluyó la escucha de jingles electorales elaborados por la audiencia.
Sobre las PASO presidenciales de UxP, en las que se medirán Sergio Massa y Juan Grabois, el exministro de Economía destacó que el dirigente social «ha dicho que si pierde va a acompañar».
«Hay manifestaciones de representaciones distintas, pero mucha claridad del rumbo que se quiere, por más que haya discusiones. No estamos ante una PASO sangrienta. Es una interna dentro de una misma expresión política», subrayó.
Y manifestó que UxP tiene claro que se trata de una elección «decisiva».
También consideró que, en caso de ser electo, y si es «respaldado políticamente», Massa «va a tener otras herramientas para enfrentarse a intereses muy poderosos como son desde el FMI a empresas concentradas locales que tienen que ver con la fijación de precios y el canal de comercialización».
Tras el establecimiento de la veda para actos de Gobierno, se entusiasmó con que «ahora empieza otro tramo de la campaña que va a ser más de recorrida por empresas, obras, pero tenemos un itinerario que no nos alcanzan los días».
«Hoy hacer política, hacer una elección, es hacerlo sin brújula porque viene siendo frecuente que las encuestas pifien, y eso no está siendo privativo de la provincia de Buenos Aires», indicó.
Añadió que «las encuestan están quemadas, ha cambiado el vínculo de la sociedad con la información, con los hechos políticos y comunicacionales, es un instrumento que hay que recalibrar»
Además destacó que en la actualidad, en su recorrida, no ve «agresividad, violencia», a diferencia de la época previa al intento de magnicidio de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
«No sé a qué se debía porque quizá eran ‘Los Copitos’, los Revolución Federal, todos pagados para que hicieran bardo», dijo sobre el intento de asesinato, y lamentó: «Hoy a casi un año no sabemos nada, pero sabemos todo».
Sobre la situación económica sostuvo que estamos ante un «fenómeno de incertidumbre, de malestar que es un hecho mundial», y evaluó que «ciertos elementos como pandemia, pospandemia, guerra, sequía y Fondo Monetario no contribuyen a que la economía se estabilice de forma definitiva».
«Lo más grave que nos pasa en el terreno inflacionario es el acuerdo con el FMI», dijo y añadió que «hay un componente cambiario que impacta muy fuerte sobre los precios».
Además, se refirió al rol de la oposición y planteó que lo «que está haciendo la derecha en Argentina es novedoso», en referencia a que en 2019 ese sector apareció como «derecha moderna, democrática y que estaba dispuesta a continuar políticas de los 12 años de Néstor Kirchner y Cristina Fernández; y hoy las novedades de la alternativa de la derecha es que dicen lo que van a hacer».
Y agregó: «Cuando dicen ‘Vamos a dinamitar’, pido que no dinamiten las escuelas nuevas; cuando hablan de echar a estatales pregunto a quiénes, porque en la provincia tenemos enfermeros, médicos, agentes policiales y docentes».
«No son propuestas, son amenazas y además te culpan por vivir arriba de tus posibilidades», afirmó.
Al reconocer la importancia del territorio bonaerense en la balanza electoral, señaló que «toda la dirigencia de UxP tiene en claro que se juega una parte importante del partido nacional en la provincia, y si no lo tuviéramos claro nos lo recuerda la oposición porque nos dicen que no van a poder hacer su programa de ajuste sin la provincia».