El director de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, Alberto Sileoni, dijo hoy estar «satisfecho» con lo realizado en el área educativa del distrito pero dijo que «no hay tiempo para la autocomplacencia» porque «lo que falta es mucho en un ciclo que augura estrecheces».
En las horas previas a la asunción del segundo mandato del gobernador Axel Kicillof, Silenoi resaltó que en esta administración la educación «está en el centro, sin discursos, con acciones concretas».
«La acción más destacada en términos de cuánto un gobernante le adjudica al tema es la inversión, y la inversión que se hizo en cuanto a infraestructura fue un 435% mayor en términos constantes que la que tomamos en 2019, esto es, 206 escuelas construidas», comentó el funcionario.
En declaraciones a AM 750, Sileoni señaló que Kicillof «suele decir que hicimos 12 mil calles en el conurbano, pero faltan 88 mil, porque había 100 mil calles de tierra, por eso no hay tiempo para la autocomplacencia».
«Estamos muy satisfechos y eso forma parte de una calificación que hizo la sociedad bonaerense pero eso ya fue, pensemos lo que falta, que es mucho en un ciclo que augura estrecheces», subrayó.
Sobre los desafíos, Sileoni mencionó que «la gente de las comunidades y de las escuelas reconocen mucho de lo que se hizo en materia salarial en infraestructura y conocimientos, pero nos piden que haya clases todos los días y que sus hijos e hijas aprendan más, así que en esa sencilla demanda que es una demanda sentida, de la sabiduría popular, está nuestra agenda para lo que viene».
«Después hay que seguir construyendo nuevas escuelas, sostener el valor del salario de los docentes, construyendo nuevas alternativas, mejorar aprendizajes y la formación de los docentes, pero fundamentalmente clases todos los días», aseveró.
Explicó que ese pedido «no se explica por el conflicto docente porque por cuarto año consecutivo las clases empezaron el 1 de marzo y tenemos expectativa de que el año próximo por quinta vez lo empecemos así, hemos reducido notablemente los obstáculos y el conflicto docente».
No obstante, comentó que «todavía hay ausencias de docentes o estudiantes y clases que se suspenden por frío o calor, por eso toda la comunidad tiene que estar allí alerta y poner en valor el día de clases y que los chicos aprendan más».