Abuelas de Plaza de Mayo repudió la decisión de la Sala II de la Cámara Federal de Apelaciones de concederle el beneficio del arresto domiciliario al represor de la ESMA Juan Antonio Azic, apropiador de la diputada nacional Victoria Donda y Laura Ruíz Damari.
«El tribunal entendió que correspondía otorgarle el beneficio en virtud de sus 76 años, e invocó cuestiones menores de salud y propias de un septuagenario. Los informes médicos practicados a Azic dicen que puede valerse por sí mismo y estaría en condiciones de continuar en la unidad penitenciaria», señaló un comunicado difundido por Abuelas.
Azic recibió una condena a catorce años y medio de prisión por la apropiación de Victoria Donda Pérez en 2012 y diez años más en 2014 por un delito similar cometido contra Laura Ruiz Dameri.
Además, el represor había sido sentenciado en 2011 a 18 años por el secuestro, desaparición y torturas a tres detenidos desaparecidos en el Centro Clandestino de Detención ESMA.
La entidad defensora de los derechos humanos afirmó que pese a todas las condenas que recibió por los delitos de lesa humanidad que cometió durante los años del terrorismo de Estado, «Azic cumplió en una unidad penitenciaria menos de cuatro años de prisión».
«Esta decisión se da en un contexto de escaso control de las prisiones domiciliarias y tras recurrentes casos de fugas y violaciones de estos beneficios. Repudiamos este tipo de decisiones que benefician a los genocidas que aún perpetúan sus crímenes al guardar información clave para el encuentro de nuestros nietos y los restos de nuestros hijos e hijas desaparecidos», concluyó la nota de Abuelas.