La Oficina de Prensa del Vaticano informó hoy que Francisco «transucrrió la noche tranquilamente y ahora está descansando».
El último parte médico de ayer confirmó «la mejoría de las condiciones clínicas del Santo Padre, que en esta jornada ha estado alternando la oxigenoterapia de alto flujo con el ventimask». Sin embargo, se necesitan más días de estabilidad clínica para resolver el pronóstico.
«Considerando la complejidad del cuadro clínico, son necesarios más días de estabilidad clínica para resolver el pronóstico», se indicó desde el Vaticano.
Se precisó que ayer «dedicó la mañana a la fisioterapia respiratoria alternándola con el descanso, mientras que, por la tarde, tras otra sesión de fisioterapia, se reunió en oración en la capilla del apartamento privado situado en el piso 10, recibiendo la Eucaristía».
«Luego se dedicó a actividades laborales», cerró el comunicado del jueves.
El Papa, de 88 años, se encuentra internado desde el 14 de febrero pasado en el hospital Gemelli, de Roma.
