Catorce intendentes del PRO se reunirán este martes en San Telmo para avanzar en un entendimiento con La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires, sin esperar la bendición de Mauricio Macri.

Mientras Javier Milei encabezará este martes un acto político en La Plata, dirigentes del PRO bonaerense se concentrarán en una cumbre en el búnker partidario de San Telmo con un objetivo claro: avanzar en un acuerdo electoral con el oficialismo libertario en la provincia, incluso si eso implica dejar de lado la venia del fundador del partido, Mauricio Macri.

El encuentro estará encabezado por el presidente del PRO bonaerense, Cristian Ritondo, y su vice, Soledad Martínez, quien además es intendenta de Vicente López. Ambos buscarán ordenar las distintas posturas internas frente a la posibilidad de confluir con La Libertad Avanza en las elecciones del 7 de septiembre.

Según pudo reconstruirse, la mayoría de los intendentes que participarán del encuentro están decididos a avanzar con el acuerdo, aún sin esperar el aval del expresidente, que prefiere postergar las definiciones hasta después del 18 de mayo, cuando se celebren las elecciones en CABA. Macri especula con un posible retroceso del oficialismo libertario y busca llegar fortalecido a la negociación con Milei, pero los jefes comunales no quieren quedar atrapados en esa pulseada.

«Tenemos que despegar la discusión bonaerense de la elección porteña», coinciden varios de los participantes. En juego no solo están las listas de diputados y senadores provinciales, sino también los concejos deliberantes de muchos municipios en los que el PRO ya no gobierna, como La Plata, Lanús, Bahía Blanca u Olavarría, y donde una división del voto opositor podría facilitar una nueva victoria del peronismo.

En ese contexto, se espera una foto conjunta de los principales dirigentes bonaerenses del PRO con una eventual declaración formal ratificando la intención de confluir con LLA. Pero también habrá reclamos internos: algunos intendentes llevarán un pedido explícito para que Macri no interfiera en las negociaciones que vienen impulsando las segundas y terceras líneas del partido.

Intendentes del PRO que participarán de la cumbre
Entre los jefes comunales que participarán del encuentro, se destacan los que responden directamente a Cristian Ritondo o a Diego Santilli, dos de los principales armadores de la estrategia bonaerense. En ese grupo se encuentran: Guillermo Montenegro (General Pueyrredón), Sebastián Abella (Campana), Javier Martínez (Pergamino), Lisandro Matzkin (Coronel Pringles), Diego Reyes (Puán), Juan Ibarguren (Pinamar), Fernando Bouvier (Arrecifes), Marcelo Matzkin (Zárate) y Jorge Etcheverry (Lobos).

A ellos se suma Ramón Lanús, de San Isidro, quien si bien responde a la línea histórica de Patricia Bullrich, hoy se alinea con el grupo más dialoguista con el oficialismo nacional. También participarán dos aliados: Francisco Ratto (San Antonio de Areco) y Santiago Passaglia (San Nicolás).

Por fuera de este bloque aparece Jaime Méndez (San Miguel), que fue electo por Juntos por el Cambio pero mantiene fuertes diferencias con Ritondo y se muestra más cercano a Joaquín de la Torre, su antecesor en el cargo. Aunque no está en la mesa chica del armado, apoya un eventual acuerdo con el mileísmo.

En contraposición, los intendentes que aún reportan a Mauricio Macri o a Jorge Macri son: Pablo Petrecca (Junín), María José Gentile (Nueve de Julio), Soledad Martínez (Vicente López), aunque su peso nacional la posiciona con una voz propia en la interna del PRO.

Un acuerdo que no espera más
La avanzada de intendentes bonaerenses deja en claro que la mayoría busca cerrar cuanto antes un esquema de coalición con La Libertad Avanza que les permita competir con chances reales frente al peronismo en la provincia. Una posible fórmula sería replicar el modelo de «lista violeta» que en 2013 permitió al macrismo sumar candidatos en las listas del Frente Renovador, entonces liderado por Sergio Massa.

En distritos clave como la quinta y sexta sección electoral, advierten que si se repite un esquema de múltiples listas opositoras, el peronismo podría quedarse con todos los cargos en juego. “Sería Vilcapugio y Ayohuma juntas”, ironizó un armador del interior bonaerense.

La decisión final todavía no está tomada, pero la presión crece: los intendentes quieren cerrar el acuerdo ahora y evitar que las tensiones del PRO nacional terminen licuando su fuerza territorial en la provincia.