Un equipo de investigadores del Área de Arqueología y Antropología —integrado por científicos del Conicet y del Área de Museos de la Municipalidad de Necochea— halló evidencias de una antigua ocupación humana en las sierras de Tandilia, provincia de Buenos Aires.
El descubrimiento se produjo en el alero El Destino 1, una cueva rocosa ubicada cerca de la localidad de San Manuel, en el partido de Lobería, y reveló vestigios de al menos 12.000 años de antigüedad.
La excavación estuvo dirigida por la arqueóloga Celeste Weitzel, especialista en tecnologías líticas, quien lleva adelante una línea de investigación centrada en el análisis de herramientas de piedra y sus modos de producción, uso y descarte.
Durante campañas anteriores, ya se habían recuperado instrumentos líticos y restos de carbón, cuya datación mediante carbono 14 confirmó la antigüedad del sitio, convirtiéndolo en uno de los más antiguos del sur bonaerense.
Los estudios revelan que las piedras utilizadas fueron transportadas desde canteras ubicadas a más de 10 kilómetros, en las sierras de Numancia y Barker. Ese dato sugiere una planificación sofisticada en los desplazamientos y actividades de los grupos humanos que ocuparon la región, evidenciando un entramado cultural más complejo del que se creía hasta ahora.
En esta nueva campaña, los investigadores también identificaron posibles semillas entre los sedimentos, un hallazgo inusual en este tipo de yacimientos. Esa línea de trabajo, liderada por las especialistas en arqueobotánica Valeria Elichiry y María Laura Ciampagna, apunta a reconstruir aspectos vinculados con la dieta, el ambiente y las prácticas de recolección de esos antiguos pobladores.
Los materiales recuperados serán preservados bajo las disposiciones de la Ley Nacional 25.743 y quedarán almacenados en el depósito oficial del Área de Arqueología y Antropología de Necochea.
Los avances obtenidos en El Destino 1 ya fueron publicados en una revista científica internacional especializada, lo que resalta la importancia global del hallazgo.
