El asesor ecuatoriano Jaime Durán Barba, principal estratego electoral de Cambiemos, puso hoy en duda la posibilidad de que el peronismo «vaya a resurgir» tras la derrota electoral que sufrió el domingo, pero advirtió que «es necesaria una oposición fuerte y formada» para que «funcione» el sistema democrático.
El consultor reveló que, en 40 años de profesión, la campaña de la provincia de Buenos Aires fue «la más difícil» de su carrera, y calificó como «una gran candidata» por «su inteligencia» y su manera de «enfrentar las cosas» a la ex presidenta Cristina Kirchner, que resultó segunda en la elección para la senaduría por la provincia.
En un balance de los resultados electorales, durante una charla en el hotel Savoy ante legisladores, empresarios y diplomáticos, Durán Barba dijo esta mañana que la clave del «éxito» electoral del presidente Mauricio Macri pasa por el hecho de que «es uno de los pocos líderes políticos» que deja de lado la «egolatría» y «estimula la aparición de otros líderes».
«La egolatría mata a todos los políticos. Cuando un político empieza a sentirse Dios se hunde», aseguró, y afirmó que «no existen los políticos eternos».
El consultor dijo tener «plena confianza» en que «mejorará» la forma de hacer política en el país y reafirmó que no cree en «un PRO ni en un Mauricio (Macri) eternos», sino que, por el contrario, tiene esperanzas de que «surjan más y mejores fuerzas políticas».
«Un gobierno que sea democrático debe ayudar para que haya una oposición sana», sostuvo, y vaticinó que «será difícil» que el peronismo, tal como se lo conoció hasta ahora, «vaya a resurgir», pero explicó que avizora la posible aparición de «otras fuerzas con elementos del peronismo».
Durán Barba observó como fundamental la existencia de una oposición «fuerte y formada» para el funcionamiento del sistema democrático en general y, en particular, para la gestión de Cambiemos.
Afirmó que el triunfo electoral del domingo de Cambiemos a nivel nacional se debió especialmente a que «la mayoría de los argentinos escogió una senda política y rechazó la posibilidad de que se vuelva a otra», y expresó que la denominada «grieta» en la sociedad es una concepción «antigua y desgraciada».
«La grieta tiene que ver con un nivel de fanatismo brutal que existió siempre en nuestro país pero que se exacerbó en los últimos años», señaló en otro tramo de su exposición.
La opinión pública, añadió, ha cambiado y es «incontrolable», y aceptó que «antiguamente se la controlaba a través de las corporaciones», pero que eso ya no sucede, y consideró que «los discursos políticos de los líderes ya no se oyen» y «se terminó la «época de los políticos que se creen dioses».
Otra de las definiciones de Durán Barba que provocó asombro en el auditorio fue aquella en la que aseguró «detestar» el markentig político. «Esto de que hacemos las cosas juntos no es un lema de campaña. Yo detesto el marketing en general, y el markenting político en particular. Hay que analizar la política con herramientas modernas y hacer cosas que sean coherentes», confió.
Para el ecuatoriano, si hubo un rasgo a destacar en la carrera política de Macri y en el PRO en general es que «han sido coherentes permanentemente» y «han trabajado realmente en grupo».
Evaluó que «es una tontería» la teoría de que el Gobierno es responsable de un ajuste o de que tiene una política de «represión» en las calles.
«Eso es una tontería. Eso se podía hacer cuando además del ajuste podía salir la gente armada a matar en la calle. Eso es de otra época. Se acabó felizmente, porque los militares temen que les metan un juicio en La Haya», ironizó, y en un tácita alusión a las denuncias por desaparición forzada de Santiago Maldonado (cuyo cuerpo finalmente apareció en el río Chubut), afirmó que «es imposible que haya desaparecidos».
«No hay ningún gobierno en América latina que tenga planes para desaparecer ciudadanos. Eso era propio de la guerra fría, y la guerra fría se acabó», resaltó.
Durán Barba se presentó en un evento organizado por la Fundación de Estudios Políticos, Económicos y Sociales de la Argentina (Fespesna), que contó con la presencia del presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, y el jefe de los senadores del peronismo, Miguel Pichetto, entre otros.
También participaron los senadores Juan Manuel Abal Medina (PJ) y Silvia Elias de Pérez (Cambiemos); los diputados Eduardo Amadeo y Patricia Giménez (Cambiemos), y ex funcionarios como Miguel Angel Toma, además de diplomáticos de distintas embajadas.