El intendente de La Plata, Julio Alak, anunció que, tras detectar serias irregularidades en la administración y uso de los fondos públicos en el municipio, en los próximos días se presentará a la justicia penal para que investigue presuntos delitos de incumplimiento de deberes de funcionario público, cometidos durante la gestión municipal anterior.
En declaraciones al diario platense El Día, el jefe comunal precisó que tras su asunción el 10 de diciembre, en las que detectó que más de la mitad de la planta de empleados registrados no asiste a trabajar.
“Encontramos 12.573 personas nombradas en situaciones que, más allá de las irregularidades administrativas en las que fueron contratadas, revisten circunstancias que lindan con el delito penal”, dijo.
Añadió que no sólo encontró «personas privadas de la libertad con contratos municipales», sino que se liquidaron sueldos a 1.481 personas «sin haberse confeccionado el legajo del personal y sin acto administrativo”.
Alak citó otros delitos presuntamente incurridos en la forma de contratación en la anterior gestión municipal, como la contratación de personas con delitos penales graves y el pago a detenidos.
En paralelo, contó que se registraron incompatibilidades previstas en el artículo 41 de la Constitución provincial, que impide la contratación de agentes que se encuentren desempeñando en otras áreas de gobierno, como, por ejemplo, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Si bien Alak no especificó el día en que formalizará la presentación en el fuero penal, advirtió estar «obligado” a hacer la denuncia.
Luego, se refirió a los altos niveles de ausentismo detectados y planteó que su administración «tiene la obligación de no renovarlos porque si lo hacemos estamos incumpliendo la ley, sería un delito penal”.
“Además, estaríamos convalidando privilegios que la gente repudia, porque nosotros tenemos que cuidar al contribuyente, que no paga impuestos, tasas y contribuciones para que nosotros lo destinemos a 4 mil ó 5 mil personas que no van a trabajar”.
Solicitó el intendente a los gremios que respalden las medidas para ayudar a “poner en orden la herramienta de gestión que es el recurso humano” y concluyó: “Queremos poner en valor al trabajador de verdad, y queremos recomponer su salario, a partir de aquellos recursos que recuperemos que hoy se van en gastos de la política”.