Alumnos de la Escuela Primaria Nº 21 de Berisso trabajan para mejorar los aprendizajes en matemática a través de las expresiones artísticas en un proyecto impulsado por uno de los centros de actividades infantiles del gobierno bonaerense denominado “SumArte”.
La actividad es llevada a cabo por la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires en uno de los 458 Centros de Actividades Infantiles (CAI) y Centros de Actividades Juveniles (CAJ) distribuidos en diferentes distritos, a los que concurren más de 11.400 chicos.
Se trata de espacios extracurriculares que buscan favorecer la inclusión, garantizar la escolaridad de chicos y adolescentes, y lograr que los jóvenes terminen sus estudios a través de actividades educativas, artísticas y recreativas.
La directora del colegio Rosario Vera Peñaloza, ubicado en las calles 154 y 14, Gabriela Calvo, contó en declaraciones a Télam que unos 75 alumnos de los 169 que concurren a ese establecimiento participan los sábados durante cuatro horas de la iniciativa a partir de la cual se enseña matemáticas mediante el arte.
Describió que se trata de una población vulnerable en la que, muchas veces, existen problemas de ausentismo, aprendizaje y emocionales, por lo cual, “buscamos recursos para que la enseñanza sea innovadora”.
“Este proyecto de CAI comenzó en abril y busca vincular transversalidad en el aprendizaje para enseñar contenidos curriculares comunes como matemática y lengua transversalmente con otras áreas”, apuntó la docente.
Así, cada sábado, los alumnos toman clases de teatro y de plástica en las que “explorando y haciendo arte estudian línea, puntos, perspectivas, formas geométricas, figuras tridimensionales”.
“Por ejemplo, estudian un pintor determinado que no trabaja con formas geométricas, un impresionista, y luego un cubista. Además, se estudian perspectivas, cómo el artista representó las formas, las líneas rectas, los triángulos o cuadrados, las paralelas”, dijo.
Sostuvo que “mensualmente, se trabaja un artista en base a un calendario y ahí ven numeración: días, minutos, segundos, horas, mes y semanas”, añadió que “en las clases de teatro se incorporan contenidos relacionados a la orientación en el espacio y las distancias” y contó que un profesor de ajedrez enseña la resolución de problemas con lo cual “estimula el razonamiento”.
Calvo expresó que “en vez de dar primero teoría en abstracto, se lo aplica en algo concreto y ello redunda en mejorías muy visibles en el rendimiento y en la autoestima de los chicos” y agregó que “es un formato distinto del de la escuela, en el que se incorpora una visión más holística”.
La directora manifestó que, además, en las clases de teatro se enseña lengua, al trabajar oratoria y expresión; y literatura, al leer piezas dramáticas, biografías de los autores, y el contexto histórico en el que las piezas fueron escritas.
En declaraciones formuladas a Télam, el ministro de Educación bonaerense Gabriel Sánchez Zinny, explicó que «la propuesta se enmarca en una de nuestras metas de gestión que es enfocarnos en las políticas socioeducativas para que los estudiantes permanezcan en las aulas”.
Agregó que “queremos apostar a una verdadera inclusión educativa, que significa que los chicos estén en las escuelas y que terminen sus estudios. La nueva propuesta de los CAI y los CAJ tiene como eje central a las escuelas, que son las hacedoras de los proyectos y quienes los ponen en funcionamiento”.