El Poder Ejecutivo oficializó la ampliación de funciones del actual embajador argentino en la Federación de Rusia, Enrique Ignacio Ferrer Vieyra, quien también representará al país ante la República de Turkmenistán, tras haber sido designado días atrás como representante diplomático en Kirguistán.
La decisión quedó formalizada mediante el Decreto 364/2025, publicado en el Boletín Oficial, y se enmarca en una reorganización de las representaciones diplomáticas argentinas en Asia Central.
La Cancillería informó que esta designación no modifica las funciones que Ferrer Vieyra ya desempeña desde marzo de 2024 en Moscú, ni su reciente acreditación en Biskek, capital de Kirguistán, sino que suma la representación en Ashgabat, sede del gobierno de Turkmenistán.
La medida fue adoptada luego de que las autoridades turcomanas completaran los procedimientos formales para otorgar el beneplácito a la misión diplomática argentina. Según indicaron fuentes oficiales, los gastos que demande esta nueva acreditación serán cubiertos con las partidas ya asignadas al Ministerio de Relaciones Exteriores y no implicarán un incremento presupuestario.
Ferrer Vieyra es diplomático de carrera, egresado del Instituto del Servicio Exterior de la Nación, y cuenta con formación académica en Derecho y Estudios Internacionales por la Universidad de Londres.
A lo largo de su trayectoria en la Cancillería se desempeñó en diversas funciones, entre ellas como jefe de Gabinete del entonces subsecretario del Mercosur, director de Asuntos Económicos Multilaterales, y miembro del Punto Nacional de Contacto para las Directrices de la OCDE. También prestó funciones en las embajadas argentinas en Estados Unidos, Reino Unido y en la Misión Permanente en Ginebra.
En la misma línea de designaciones, el Ejecutivo también oficializó recientemente el nombramiento de Ramiro Hernán Velloso como nuevo embajador ante el Estado de Kuwait, mediante el Decreto 348/2025.
Velloso se desempeñaba hasta ahora como ministro plenipotenciario de primera clase y fue trasladado desde el Ministerio de Relaciones Exteriores a la sede diplomática en el Golfo Pérsico.
Los decretos llevan la firma del presidente Javier Milei y del canciller.