Un proyecto de ley que adhiere la norma nacional de Parto Humanizado y establece los derechos de las madres, padres e hijos durante el proceso de nacimiento será tratado en la próxima sesión de la Cámara de Diputados bonaerense.
La propuesta parlamentaria, presentada por la diputada Marian Larroque (Frente de Todos) ya tiene dictamen de comisiones y busca que la provincia de Buenos Aires adhiera la Ley nacional 25.929 sancionada en 2004.
Entre otras cuestiones, establece el derecho de madres y padres de ser informados sobre las distintas intervenciones médicas de manera que puedan optar libremente frente a diferentes alternativas; y el derecho de la mujer de ser tratada con respeto, garantizándole intimidad y teniendo en cuenta sus pautas culturales.
Se determina que toda mujer tiene derecho al parto natural y respetuoso en cuanto a su tiempo biológico, evitando prácticas invasivas y el suministro de medicación sin justas causas; y a estar acompañada por una persona de su confianza durante el trabajo de parto, parto y postparto.
A la vez dispone, entre otras cuestiones, que la persona recién nacida tiene derecho a ser tratada en forma respetuosa y digna; a la internación conjunta con su madre en la sala.
Larroque expresó que «luego de largos años de lucha, la Ley Nacional de Parto Humanizado fue sancionada en el año 2004, conformando una herramienta normativa para prevenir y erradicar la violencia obstetricia ejercida en el proceso de embarazo, parto y post parto» pero remarcó que «sin embargo, al día de la fecha, la provincia de Buenos Aires todavía no adhirió bajo la excusa de que se trata de una ley de oficio».
«Somos sólo tres provincias las que no estamos adheridas: Buenos Aires, Formosa y Catamarca», dijo.
«Durante la pandemia los casos de violencia obstétrica aumentaron. En virtud de las medidas de prevención de contagio de Covid-19, algunos establecimientos, tanto públicos como privados, toman medidas que no están indicadas en ninguno de los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud», remarcó.
Analizó la legisladora que «dentro de las vulneraciones más frecuentes en este marco, aparece el impedimento a que la persona gestante esté acompañada al momento de parir» y añadió que también es recurrente «la separación de la diada madre-hijo por horas o incluso días».
«Estos procedimientos, está demostrado, pueden producir daños psíquicos y emocionales, además de afectar el inicio de la lactancia materna, trayendo serias consecuencias difíciles de revertir», resaltó.
Para Larroque, «este contexto nos obliga a replantearnos el modo en el que los seres humanos nos relacionamos entre nosotros y con el mundo que habitamos, por ello consideramos que la adhesión a la Ley, que ya tiene dictamen de comisiones y podría tratarse en la próxima sesión de la legislatura, es el punto de partida para empezar a construir otro paradigma».
«Propiciar un trato respetuoso de la dignidad humana y generar un contexto amoroso para las personas que van a parir y para quienes llegan al mundo, es una necesidad ineludible para los y las bonaerenses», evaluó la diputada y recordó que «hay muchos colectivos que hace años vienen trabajando estas temáticas y continúan peleando por la adhesión».
Luego, planteó que el hecho de que la Ley de Parto Humanizado se cumpla «es fundamental para que las personas gestantes accedan a la información oportuna para que puedan decidir sobre sus cuerpos».
«Dentro del espacio político del que formo parte, entendemos que el Estado es quien debe garantizar estos derechos y tenemos un gobierno con la voluntad política para hacerlo», finalizó.
Además, la legisladora presentó en Diputados un proyecto de ley que busca crear el Plan Estratégico Provincial de Parto Respetado con el fin de acompañar la Ley de Adhesión y generar mecanismos para la implementación efectiva de los derechos que consagra la ley nacional 25.929.
Los ejes principales de esa propuesta son garantizar el respeto de los procesos fisiológicos, la no medicalización y el cuidado del parto como hecho sexual.