Bianco

El jefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bianco, y el ministro de Salud, Daniel Gollan, remarcaron hoy que si bien las políticas de restricción de la circulación «dan resultado», no son suficientes «para evitar que el sistema se sature y colapse» y destacaron la necesidad de «bajar drásticamente los contagios de coronavirus», así como «tomar medidas de un lado de la General Paz y del otro».
«Tal cual habíamos planteado hace más de un mes, desde el gobierno provincial veíamos una segunda ola un poco anticipada y muy agresiva. Lamentablemente, las proyecciones que habíamos realizado, se constataron en la realidad», planteó Gollan durante una conferencia de prensa encabezó junto a Bianco en La Plata.
El funcionario destacó que el pico de la primera ola se registró en agosto del año pasado, con 5.845 casos promedio diarios por semana, mientras que en abril de 2021 la cifra máxima detectada fue de 11.746.
Los casos de coronavirus en la provincia de Buenos Aires ascendieron a 1.253.763 tras confirmarse 8.884 nuevos contagios en las últimas 24 horas y los fallecidos llegaron a 32.000, desde el inicio de la pandemia en el país, en marzo de 2020.
En territorio bonaerense, hay 39 municipios en Fase 2 (los 35 del AMBA y cuatro del interior: Bolívar, Zárate, Castelli y General Villegas), con mayores restricciones; otros 58 en fase 3; y 38 en fase 4.
Así, los funcionarios trazaron un panorama de la situación de la pandemia en territorio bonaerense de cara al 30 de abril, cuando quedarán sin efecto las medidas para restringir la circulación nocturna y limitar los encuentros sociales que el Gobierno había dispuesto.
El ministro de Salud recordó que tres semanas atrás, durante una reunión con autoridades nacionales y del gobierno de la Ciudad Autónoma, «la provincia llevó esta postura, diciendo que íbamos hacia un crecimiento enorme en base a análisis científicos y a evidencia de lo que ven los efectores de salud».
El titular de la cartera sanitaria expuso que en aquel entonces, «todo indicaba que se iba hacia un crecimiento de casos», pero lamentó que «no hubo consenso en ese diagnóstico» porque la administración porteña «llevó una postura muy optimista, diciendo que tenía la situación muy controlada y que las terapias no iban a saturar».
«El diagnóstico de la provincia era el correcto. Por suerte, ahora vimos que las autoridades de CABA están preocupadas por la realidad: ocupación de casi 100 por 100 en el sector privado y una situación extrema también en el sector público», afirmó.
Gollan planteó que «las políticas de restricción de la circulación dan resultado», pero advirtió que «pensar que el resultado alcanzado hasta ahora es suficiente, es erróneo».
«Se ven resultado positivos a las medidas que se tomaron. No alcanzan para evitar que el sistema se sature y colapse. Vamos a tener que pensar en nuevas medidas acotadas en el tiempo», prosiguió y remarcó que «no es suficiente que la curva deje de crecer» dado que se requiere que «baje drásticamente» porque «el sistema sanitario del país no va a soportar 30 mil casos diarios».
En ese contexto, Gollan explicó que «esta última semana tuvimos la misma cantidad de casos que la anterior», señaló que «la sensación es que empiezan a estabilizarse los contagios, no en una meseta alta, sino casi en la punta del Aconcagua».
El funcionario precisó que la ocupación de camas asciende al 75,89% en el AMBA y en 55,18% en el interior de la provincia y dijo que se logra evitar el colapso sanitario debido al sistema de derivaciones implementado, a la incorporación de 250 camas de terapia, 1.000 de cuidados generales y a la designación de 1.450 profesionales de la salud.
Por otro lado, reconoció que creció la demanda de oxígeno en un 300% y sostuvo que «las medidas que haya que tomar para bajar la circulación también van en línea a no colapsar el sistema de producción de oxigeno».
«A nadie le está faltando atención. Pero si no bajamos la cantidad de casos, el sistema no aguanta», recalcó.
Así, se mostró confiado en poder «consensuar con el gobierno porteño medidas a la altura que se necesitan y tener en un tiempo acotado una perspectiva diferente».
«El AMBA es un único sistema sanitario. Cuando tomamos medidas de un lado y del otro de la general Paz, hay que tomarlas en consenso y en base a la realidad de lo que está pasando. Y la realidad es que está todo el mundo cerca de la saturación», insistió.
Luego Gollan manifestó que «la vacunación es otra luz de esperanza», enfatizó que el 94,56% del personal de salud vacunado, lo que evitó que a esta altura de la segunda ola «los planteles estén diezmados».
Celebró el «esfuerzo» que realizan los gobiernos nacional y provincial para avanzar con la campaña de inmunización de la población «en un mundo carente de vacunas» y anticipó que la próxima etapa en la provincia se vacunará a menores de 60 años con comorbilidades.
En ese tono, Bianco rememoró que «hace 10 días se restringieron poquitas actividades y se limitaron horarios y eso está dando resultado», indicó que «si bien este domingo tuvimos casi exactamente los mismos casos que la semana pasada, no hay nada para festejar».
El funcionario evaluó que «el gobierno nacional y provincial tomaron las medidas adecuadas con el mayor control posible» y se mostró agradecido con «el pueblo de la provincia, que estuvo nuevamente a la altura de la circunstancia para cumplir esas medidas entendiendo la gravedad de la situación».
«Vamos a seguir trabajando con el gobierno nacional, esperamos en coordinación con el gobierno de CABA para definir de acuerdo a datos reales -gran cantidad de casos y ocupación de camas- nuevas medidas a partir del 30 de abril», agregó el jefe de gabinete.
«En el AMBA tenemos unas 750 camas de terapia libres (una ocupación del 76%). En el interior de la provincia tenemos 600 camas libres (una ocupación del 55%). El promedio de ocupación de la provincia es del 69%», graficó.
En ese sentido, dijo que «ayer, el doctor Fernán Quiroz dijo que hay un 82% de ocupación de camas en el sistema público y un 88% en el privado. Lo que implica que hay 1.000 camas ocupadas entre el sistema público y privado. Quedan 140 camas libres».
Bianco apuntó que «crecientemente se producen derivaciones desde la Ciudad de Buenos Aires al conurbano bonaerense» y añadió: » digo estos números para justificar la necesidad de coordinación que tenemos con la Ciudad: somos un único espacio sanitario».
«Tenemos que tomar el mismo tipo de medidas y cumplirlas de un lado de la General Paz y del otro», reiteró.
Puso de relieve que «de cada 10 pacientes que ingresan a terapia intensiva, 6 fallecen. Y, si tienen más de 70 años, las que se mueren son 7», dijo y pidió trabajar «para lograr que no lleguen a terapia intensiva porque una vez que lo hacen no se puede asegurar su supervivencia».
«Necesitamos bajar la circulación para evitar que la gente llegue a terapia intensiva no sólo para que el sistema no sature sino para que los pacientes no fallezcan», subrayó.