Procida, la pequeña y encantadora isla del Golfo de Nápoles, es el destino perfecto para una escapada familiar de un día. A solo 40 minutos en ferry desde Nápoles, este oasis colorido ofrece una mezcla de paisajes impresionantes, calles pintorescas y actividades ideales para grandes y chicos. Aquí te proponemos un itinerario pensado para disfrutar en familia, con especial atención a los más pequeños.
Mañana: Rumbo a la isla
El día comienza temprano en el puerto de Nápoles, donde se aborda un ferry hacia Procida. El trayecto de poco menos de una hora ofrece vistas panorámicas del Mediterráneo y de las islas cercanas. Asegúrate de llevar algo para picar y que los niños puedan observar el paisaje desde la cubierta.
Una vez en Procida, la primera parada será Marina Corricella, el puerto más pintoresco y antiguo de la isla. Aquí, las casas multicolores crean un escenario de cuento de hadas. Pasea por el puerto, donde los niños pueden ver los pequeños barcos de pesca y correr libremente por las calles estrechas y seguras. En uno de los bares o cafeterías locales, una parada para disfrutar de un gelato o un jugo natural es ideal para refrescarse.
Mediodía: Explorando la historia
Procida está llena de historia, y una parada en el Castillo d’Avalos, ubicado en la parte más alta de la isla, será una aventura que fascinará a toda la familia. Aunque la estructura no siempre está abierta al público, su exterior y las vistas desde la colina sobre el mar son espectaculares y ofrecen un lugar tranquilo para un pequeño picnic en familia. Es una buena oportunidad para que los niños corran un rato, mientras los adultos disfrutan de las postales inolvidables de la isla.
Cerca del castillo, se puede visitar la Abadía de San Michele Arcangelo, un antiguo monasterio con un museo que muestra la rica historia de Procida. Si bien los más pequeños podrían no estar tan interesados en la exposición, las vistas y la atmósfera del lugar bien valen la visita.
Un imprescindible es en la zona de Terra Murata la grandiosa panorámica desde su terraza mirador a la Marina Corricella, la imagen más fotografiada de la isla que no te puedes perder por nada del mundo.
Una preciosa imagen de casas en tonos pastel que se pierden por la ladera y que están presididas por la cúpula amarilla de la iglesia de Santa María delle Grazie.
Cómo llegar al Mirador de Corricella: Una vez que cruces la Plaza de los Mártires llegarás a la zona de Procida conocida como Terra Murata, sube la cuesta y encontrarás el famoso mirador, no tiene pérdida. Aquí la ubicación exacta: https://www.google.es/maps/place/Mirador+Corricella/@40.7616541,14.0319446,17z/data=!3m1!4b1!4m6!3m5!1s0x133b13b0c09e89f1:0xc0e49e6b63bd418f!8m2!3d40.7616541!4d14.0319446!16s%2Fg%2F11qfypzjmf?hl=es&entry=ttu&g_ep=EgoyMDI0MTAwMi4xIKXMDSoASAFQAw%3D%3D
Tarde: Relax en la playa
A la hora del almuerzo, puedes dirigirte a Chiaiolella Beach, una de las playas más populares de Procida. Aquí, la familia puede disfrutar de un almuerzo en algún restaurante frente al mar, con opciones tanto de mariscos frescos como de platos más sencillos para los chicos, como pizzas y pastas. Después, la playa es el lugar perfecto para pasar la tarde. Las aguas tranquilas y poco profundas son ideales para que los niños jueguen y se bañen de forma segura.
La playa de Chiaiolella tiene un ambiente relajado y familiar. Si el clima lo permite, también se pueden alquilar bicicletas o incluso pequeñas embarcaciones para explorar la costa. Las sombrillas y tumbonas están disponibles en alquiler, lo que brinda a los padres un lugar cómodo donde relajarse mientras los niños se divierten construyendo castillos de arena.
Tarde-noche: Despedida con sabor local
Antes de regresar al puerto para tomar el ferry de vuelta a Nápoles, una última parada en Piazza dei Martiri permitirá saborear el auténtico espíritu de Procida. En este pequeño rincón de la isla, rodeado de casas color pastel, puedes disfrutar de una cena ligera con vistas al atardecer.
El regreso en ferry al puerto de Nápoles cierra el día con un paseo tranquilo, donde los más pequeños seguramente se quedarán dormidos después de tantas aventuras. Este día en Procida, diseñado para familias, combina diversión, historia y descanso, dejando recuerdos inolvidables en todos los miembros de la familia.
Consejos útiles para familias
- Ferry: Los ferries desde Nápoles hacia Procida salen frecuentemente, pero es recomendable comprar los billetes con antelación, especialmente en temporada alta.
- Carritos de bebé: Las calles de Procida son empinadas y empedradas, por lo que es mejor llevar una mochila porta bebé o un carrito ligero si viajas con niños pequeños.
- Protección solar: Las playas y paseos pueden ser muy soleados, así que asegúrate de llevar gorros, protector solar y mucha agua para hidratarte.
Procida ofrece el equilibrio perfecto entre exploración y relajación, haciendo que tanto adultos como niños disfruten al máximo de esta joya mediterránea.