El Congreso está todavía lejos de lograr la paridad de género que establece la Ley 27412 en Ámbitos de Representación Política, ya que mientras en la Cámara de Diputados la representación femenina caerá desde el recambio parlamentario de diciembre, en la de Senadores se amplía pero con una sola integrante más.
La norma, conocida como Ley de Paridad, fue sancionada en noviembre de 2017 y puesta en funciones desde las elecciones de 2019 y reparte en partes iguales, entre hombres y mujeres, los puestos en las listas de candidatos a legisladores.
Sin embargo, esa igualdad no se manifiesta en la composición del Congreso donde los hombres siguen siendo mayoría ya que, por lo general, son quienes suelen encabezar las listas.
En el Senado esa circunstancia se vuelve más evidente porque la ley establece que por la lista ganadora ingresan dos legisladores (habitualmente un hombre y una mujer) y por la segunda, sólo uno.
Salvo algunas excepciones, como los partidos políticos con uno o dos legisladores con representación en la Cámara alta, el resto de los bloques no llega al cincuenta por ciento de representación femenina.
Hasta diciembre, el Senado tendrá un 43% de mujeres (32 sobre 72). A partir del recambio subirá algunos puntos para llegar al 45,8% (33 sobre 72).
Los únicos bloques que cumplirán con la paridad son Juntos Somos Río Negro, ya que su actual integrante, Alberto Weretilneck, fue elegido gobernador y será reemplazado por quien era su segunda en la lista, la legisladora provincial Mónica Silva, el Frente de la Concordia de Misiones y el flamante Por Santa Cruz que tendrán dos integrantes cada uno: hombre y mujer, respectivamente.
En la otra punta, los dos bloques con peor paridad serán la Libertad Avanza, con un 28,5% de mujeres (dos sobre siete integrantes); y el PJ Federal, con un 33% (una de tres).
Entre los interbloques grandes, Unión por la Patria (hoy el Frente de Todos) lleva su porcentaje al 48,5% (16 mujeres sobre 33 miembros) y Juntos por el Cambio llegará al 45,8% (once sobre 24).
En cambio, la cantidad de mujeres que integra la Cámara de Diputados bajará desde diciembre de 117 a 111 sobre 257 legisladores totales.
Así, tras varios períodos de avance, la presencia femenina experimentará desde el 10 de diciembre una baja del 45,52% al 43,19%.
De hecho, el 45,52% vigente por un mes más, es el porcentaje máximo de mujeres al que llegó la Cámara, un importante avance en relación al 3,93% de representación femenina con que se reanudó la vida democrática en 1983.
De las 130 bancas que se pusieron en juego en esta elección, 56 pertenecían a mujeres, y sólo lograron ser revalidadas por el mismo género 50 de ellas.
El resto de los escaños femeninos (61) están en manos de quienes tienen mandato hasta 2025 e ingresaron en 2021.
Esas seis bancas de diferencia marcan una disminución femenina en la Cámara, ya que la aspiración de alcanzar las 129 -mitad más una- se aleja.
El hecho de que la mayoría de las listas sean encabezadas por varones tuvo mayor incidencia en provincias que renovaban pocos diputados (entre 2 y 4).
Por caso, en Chaco, en Chubut y en Jujuy las tres bancas que se disputaban terminaron en manos de tres fuerzas distintas, cada una de ellas encabezadas por un hombre, por lo que esas provincias no sumaron representación femenina.
En San Luis y en La Pampa también se dio el ‘cero’, aunque en este caso con el ingreso de dos hombres por ser la cabeza de las dos listas que obtuvieron las bancas en disputa.
En el resto de los distritos la relación fue disímil: entre los más numerosos, Buenos Aires con 16 sobre 35; Santa Fe con 4 sobre 10 y Mendoza con 2 sobre 5, tuvieron tendencia negativa.
La Ciudad de Buenos Aires, con 6 sobre 12, contribuyó con un 50%, en tanto que en Córdoba, con 5 sobre 9, prevaleció el ingreso de mujeres.
También se registraron números positivos en Salta y en Santiago del Estero (2 sobre 4), donde debido a que sólo ingresaron diputados de dos y una boleta, respectivamente, se abrió la posibilidad para las mujeres que ocupaban los segundos lugares en las boletas.
En el resto de las provincias se dio el ingreso de una sola mujer, aunque la cantidad de bancas en disputa era diferente.
En Tucumán se pusieron en juego 5; en Misiones, Corrientes y Entre Ríos, 4, y en Tierra del Fuego, La Rioja, Rio Negro, San Juan y Formosa, 3.
Con mejor porcentaje que en las anteriores, las mujeres también obtuvieron una de las dos bancas que se disputaron en Santa Cruz, Neuquén y Catamarca.