La Anses confirmó que el aumento a partir de setiembre de las jubilaciones y demás prestaciones sociales será del 6,68%, al tiempo que restableció las asignaciones familiares para los trabajadores en relación de dependencia y las prestaciones de riesgos de los trabajadores de las «zonas desfavorables» que habían sido anuladas y luego suspendidas por las fuertes críticas de las provincias involucradas.

Con el aumento del 6,68%, los jubilados y demás beneficiarios de prestaciones sociales acumularán en doce meses -en setiembre de 2017 fue el último aumento con la anterior fórmula- un incremento del 19,2% cuando se espera que la inflación registre una suba de alrededor del 32%.

A través de la Resolución 125, publicada hoy en el Boletín Oficial, además de la suba del 6,68% de las jubilaciones, el Gobierno confirmó la reducción de los ingresos para percibir las asignaciones. El piso salarial subió de $ 200 a $ 3.004,25, el límite de ingreso individual se redujo de $ 47.393 a $ 41.959 y el ingreso familiar de $ 94.786 a $ 83.917, no pudiendo ningún integrante superar más de $ 41.959. El nuevo límite mínimo de ingresos no se aplica a los beneficiarios de la Prestación por Desempleo y el mínimo y el tope no se aplica para los hijos con discapacidad.