La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner apeló este viernes su procesamiento ante el juez federal Claudio Bonadio en la causa que la acusa de ser jefa de una asociación ilícita y señaló que al pedir su desafuero el magistrado «agrede» a la democracia. Ahora, la Sala I de la Cámara Federal convocará a una audiencia a los abogados y luego resolverá.

En un escrito presentado por el abogado Carlos Beraldi se indicó que el pedido de desafuero es una «agresión judicial al sistema democrático argentino». Y acotó además que la lectura del procesamiento, de más de 500 páginas es «agotadora» e «inútil» y sostuvo que el magistrado en su acusación es impreciso y que viola garantías constitucionales.

El defensor de la exmandataria afirmó que el propio Bonadio escribió que «no se han constatado entregas de sumas ilegítimas a manos de la propia Fernández», en alusión a la actual senadora y aseguró que con esa frase reconoció que no hay elementos de prueba contra la exmandataria.

Asimismo, el letrado remarcó que en los llamados «cuadernos de las coimas» del chofer Oscar Centeno no aparece la expresidenta, sólo sus domicilios de la calle Uruguay y la quinta de Olivos, pero indicó que en esos registros hay anotaciones que se comprobaron que son falsas, como fechas y montos de dinero, según lo que dijeron los arrepentidos.