Un auto eléctrico monoplaza adaptado con realidad virtual para recorrer entornos físicamente lejanos o aún no construidos, como parques industriales o proyectos de modificaciones urbanas, fue desarrollado por una joven empresa argentina enfocada en la innovación tecnológica.
El proyecto, que tuvo su primera presentación en el marco de la exposición Epiba 2017 en mayo pasado, permitió que cualquier persona se sentara en el carro y se colocara el casco de realidad virtual descubriera una experiencia inmersiva en cada rincón del «Ecoparque industrial Los Libertadores».
Bajo los pilares de la ecoeficiencia y la sustentabilidad, este ecoparque se constituye en un mega emprendimiento de más de 500 hectáreas sobre el eje comercial Mercosur, en el partido bonaerense de Campana.
«Esta misma idea del vehículo con realidad virtual también se puede aplicar, por ejemplo, en escuelas para que los estudiantes puedan explorar la superficie de la Luna o de Marte de una forma divertida. O también en grandes modificaciones de ciudades o estacionamientos», explicó Martín González, director de Delta 3, la empresa argentina encargada del desarrollo tecnológico.
Los espacios de grandes dimensiones aún no construidos, que antes sólo podían verse a través de imágenes estáticas o presentaciones tipo render, ahora habilitan una nueva interacción gracias a la realidad virtual.
De esta forma, las personas que asistieron a la exposición pudieron ver dónde iban a quedar los paneles solares, cuáles iban a ser las facilidades o cómo quedaría la parquización del espacio, al subirse al carro de realidad virtual e interactuar con un espacio reconstruido digitalmente y en 3D, añadió González.
Este tipo de experiencias se suma a las ya tradicionales formas de venta de inmuebles, y genera una interacción más real y cercana con entornos físicamente lejanos o aún no construidos.
«Es un proyecto cien por ciento argentino, ya que desarrollamos desde el carro (tipo de golf) hasta la reconstrucción digital en 3D del modelo del ecoparque», resaltó el directivo de esta empresa ubicada en el partido bonaerense de Lanús.
Desde su fundación hace apenas cuatro años, Delta 3 ya tiene en su haber otras iniciativas como un simulador de vuelo «disruptivo» porque con un mismo aparato los pilotos pueden entrenarse en distintos modelos de aviones.
Otra de las iniciativas planificadas es un simulador de intervenciones laparoscópicas, para que estudiantes de Medicina puedan contar con todo el instrumental que necesitan para experimentar cirugías.
En estos últimos meses, y a raíz del surgimiento de nuevas aplicaciones en realidad virtual, esta joven compañía incrementó en un 30 por ciento a su personal y está trabajando con pedidos del exterior, afirmó González.