Los funcionarios salientes del gobierno bonaerense destacaron hoy que los cambios implementados por el gobernador, Axel Kicillof, en el gabinete dotarán al equipo de mayor «volumen político», le aportarán anclaje territorial y celeridad para concretar los cambios que lleven a la «reconstrucción» de la provincia.
Anoche, el gobernador Axel Kicillof anunció una reconfiguración en su equipo de colaboradores, luego de los cambios dispuestos por el presidente Alberto Fernández en el gabinete nacional, tras las elecciones PASO del 12 de septiembre.
En el nuevo esquema de funcionarios bonaerenses, el actual intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, reemplazará a Carlos Bianco en la Jefatura de Gabinete.
Además, el mandatario provincial dispuso designar a la diputada Cristina Álvarez Rodríguez como ministra de Gobierno en el lugar de Teresa García, y al jefe comunal de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini, en el cargo de Agustín Simone en el Ministerio de Infraestructura.
Las modificaciones en el Gabinete de la provincia de Buenos Aires se concretaron dos días después de los cambios anunciados por el presidente Alberto Fernández a nivel nacional y tras una reunión que el gobernador mantuvo ayer en El Calafate con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Tras los resultados de las PASO, Kicillof también había mantenido diversos encuentros con los jefes comunales justicialistas del interior provincial y del conurbano en los que analizaron «las principales demandas y necesidades de los vecinos de los distritos para desarrollar medidas que brinden respuestas adecuadas».
Se estima que los nuevos ministros jurarán mañana, en un acto que se desarrollará en el Salón Dorado de la Gobernación, en La Plata.
Anoche Kicillof, en declaraciones a C5N, explicó que la reformulación de su gabinete apunta a dar «un renovado impulso para la etapa que viene, siempre pensando que a medida que aflojan los indicadores epidemiológicos por el avance de la vacunación, viene la reconstrucción, el renacimiento y la reactivación».
Con nuevas figuras en el organigrama ministerial, el gobernador Kicillof tiene previsto para la etapa de la pospandemia del coronavirus profundizar políticas de incentivo a la producción económica y el empleo para acelerar la reactivación.
En paralelo, el mandatario busca fortalecer el enfoque territorial y, con ese propósito, eligió a dos intendentes peronistas del conurbano con amplio conocimiento de las problemáticas bonaerenses y a una dirigente política con vasta experiencia y recorrido en la gestión del distrito.
Además, Nardini e Insaurralde cuentan con el plus de tener un excelente vínculo con el presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, y de haber logrado en sus distritos victorias en las PASO para el Frente de Todos.
Es que Nardini obtuvo en Malvinas Argentinas el 47,86% de los votos contra el 28,98% de tres listas de la alianza opositora Juntos; mientras que el segundo cosechó en Lomas de Zamora un 43,27% contra el 33,20% de las dos nóminas de Cambiemos.
Los intendentes siempre reclamaron espacios de poder en el gabinete bonaerense, y en el entorno de Kicillof entienden que, cumplida esa demanda, los jefes comunales se involucrarán más profundamente en la administración de la provincia y confían en que ello repercuta en el resultado electoral de las generales de noviembre.
En ese sentido, Bianco -quien pasará de ser jefe de Gabinete a jefe de asesores de Kicillof- evaluó hoy que las modificaciones implementadas en el equipo «son para reforzar el gabinete y profundizar las políticas de reactivación, acelerar el crecimiento y generar empleo, lo que siempre hizo el peronismo».
«Escuchamos el mensaje de las urnas y a partir de ello entendimos que hay que darle más volumen político al equipo», expuso en declaraciones a radio El Destape y Provincia el funcionario.
A la vez, consideró que los intendentes Insaurralde y Nardini «tienen vastísima experiencia de gestión municipal y en la ejecución de obra pública».
En igual tono se manifestó la ministra de Gobierno bonaerense saliente, Teresa García, quien analizó que los cambios en el Gabinete de la provincia responden a que «hace falta un nuevo aire».
En una entrevista con FM La Patriada, la funcionaria saliente y candidata a senadora provincial subrayó que el Frente de Todos tiene la responsabilidad «como gobierno de resolver la cotidianidad de las familias», algo que, dijo, «se hace con políticas y con personas».
Sostuvo que los cambios en el equipo de Gobierno son «entendibles», dijo sentir «alegría y satisfacción» por tener a dos intendentes en el Gabinete, ya que son «los que más saben en la diaria y en la cotidiana qué es lo que pasa».
Luego puso de relieve que tanto Insaurralde como Nardini «tienen mucha experiencia ejecutiva» y ponderó a su reemplazante Álvarez Rodríguez, de quien destacó su «gran compromiso y trabajo».
En tanto, Simone -quien desde ahora tendrá a su cargo el Instituto de la Vivienda- evaluó que los cambios dispuestos en el Gabinete bonaerense «seguramente permitirán fortalecer esta etapa de reactivación económica».
«Estos cambios darán un nuevo impulso territorial a la gestión. Estoy convencido de que Leo Nardini podrá llevar adelante de manera excelente los desafíos que tiene el Ministerio», apuntó.
El senador bonaerense del Frente de Todos Francisco Durañona también apoyó la decisión del gobernador de realizar cambios en el Gabinete, al juzgar que «era necesario refrescarlo».
«Es una buena reacción del Gobernador y apoyo los nombres porque conocen la provincia; faltaba política en el Gabinete bonaerense», afirmó y añadió que «es fundamental fortalecer los gabinetes con experiencia territorial».
kicillof 