El denominado «primer bombo peronista», que perteneció a Juan Constantino Clidas, un trabajador del frigorífico Swift de Berisso de los años 40 y miembro de la murga «Los Martilleros» fue donado hoy al Museo Histórico Nacional, ubicado en el Parque Lezama de la Ciudad de Buenos Aires.
En el marco del Día de la Lealtad, el instrumento fue donado por los descendientes de Clidas en un acto del que participaron el ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer; la directora nacional de Museos, María Isabel Baldasarre, y el director de Museo, Gabriel Di Meglio.
Según se indicó desde las redes sociales del Museo, el bombo ahora formará parte de la exhibición «En busca del siglo XX».
El objeto cobró relevancia histórica cuando el 10 de agosto de 1944, el entonces vicepresidente Juan Domingo Perón habló ante los trabajadores de la carne en la ciudad de Berisso y los miembros de la murga con sus bombos espontáneamente comenzaron a tocar en el marco de una caravana que avanzaba hacia el palco donde él se encontraba.
Ese mismo bombo fue utilizado el 17 de octubre de 1945 por los trabajadores y trabajadores que marcharon hacia Plaza de Mayo para exigir la libertad de Perón, que había sido detenido en la Isla Martín García por el gobierno de Edelmiro Farrell.
Desde aquella época, el bombo que suele usarse en la murga y el carnaval, fue introducido por los obreros también en las manifestaciones. Si bien para los opositores a Perón se trataba de algo vulgar e impropio de la política seria, dentro del movimiento justicialista, su uso se transformó en un emblema, símbolo de lucha social y del arraigo del movimiento en la cultura popular.
En ese sentido, Juan Carlos, el hijo de Clidas, contó hoy a Télam tras el acto que «en el libro ‘El escudo, la marcha y el bombo’ se hace un estudio en el que se relata que este fue el primer bombo usado en el peronismo. Hubo otros partidos, como el radicalismo, que lo utilizaban en sus actos, pero el de mi padre fue el primero del PJ».
«El bombo tiene una historia muy grande: se usó en el 44 en una asamblea con Perón y, un año después, en el 17 de octubre», relató.
En ese marco, especificó que la donación «se decidió entre toda la familia», ya que junto a sus tres hijas consideraron «que el bombo debía estar al alcance de cualquiera que lo quiera ver y no en una casa».
«Mi papá era nieto de inmigrantes griegos y trabajaba como despostador en el frigorífico Swift. En 1942 formó la murga Los Martilleros, militaba en el Partido Laborista con Cipriano Reyes, luego apareció Perón y los trabajadores pasaron a tener aguinaldo, derechos laborales y a vivir de manera diferente», recalcó y señaló que «el 17 de octubre en Berisso fue muy importante».
Luego, Di Meglio, expresó que «más allá de las posiciones políticas, nadie puede negar la importancia histórica que tiene una pieza así como símbolo del peronismo».