Tras el paréntesis navideño, el gobierno bonaerense retoma hoy las negociaciones para que mañana a partir de las 16 se sancionen en la Legislatura el Presupuesto 2025, la Ley Impositiva y el endeudamiento enviados por el gobernador Axel Kicillof. Zanjadas las diferencias al seno del propio oficialismo, la clave ahora es lograr que la oposición aporte los dos tercios necesarios para la autorización de endeudamiento por U$D 1.300 millones.

Cerca del gobernador precisan que el paquete legislativo que envió el Ejecutivo debe aprobarse completo. “No sirve tener el Presupuesto solo. Tiene que salir el endeudamiento y la Ley Fiscal: el plan de gastos debe estar acompañado por las herramientas para contar con los ingresos”, grafican y remarcan “el endeudamiento es para refinanciar la deuda que contrajo María Eugenia Vidal y cubre los vencimientos”.

El viernes pasado, las bancadas del oficialismo y de la oposición habían acordado sancionar las iniciativas, quitando la autorización para el endeudamiento que hace Kicillof bajo la promesa de tratarla en febrero. El Gobierno lo rechazó de plano. “¿De dónde quieren que obtengamos los recursos para financiar obras, pagar la deuda, garantizar los salarios e invertir en seguridad, salud y educación?”, se preguntaban.

Desde la oposición también proponían que el Gobierno requiera del permiso de la Legislatura cada vez que el año próximo deba salir a los mercados. “Quieren al endeudamiento de rehén”, retrucaron en el Ejecutivo.

La pelea interna en el propio peronismo también hizo lo suyo: se impulsaron cambios en cerca de 70 artículos del Presupuesto, la mayoría de los cuales Kicillof rechazaba, al tiempo en que varios intendentes presionaron para crear un fondo por 200 mil millones de pesos para seguridad y elevar en un 1% los recursos coparticipables para los municipios (400 mil millones de pesos). El resultado fue que las sesiones naufragaron y no hubo presupuesto.

A lo largo de los días, esas tensiones se fueron calmando, sobre todo, a partir del compromiso de Kicillof ante los jefes comunales de crear un fondo de libre disponibilidad de un 30% más que el de este año que podría llegar hasta 200 mil millones. 

El lunes pasado, fuentes legislativas indicaron que el flamante presidente de la Cámara de Diputados, Alexis Guerrera, y el titular del bloque de Unión por la Patria, Facundo Tignanelli, lograron reunir los votos para el Presupuesto y la Ley Impositiva, es decir, la mayoría simple (47 votos de 92 presentes), pero no lograban que avance el ok para el endeudamiento. Hoy, destrabar ese ítem es la clave para obtener un acuerdo.

Qué otras cosas se negocian

Los radicales, el PRO y los libertarios dialoguistas (aquellos que llegaron a sus bancas por LLA pero antes de asumir armaron sus propias bancadas) reclaman varias cuestiones para aportar los votos que faltan.

Además de algunos retoques en la Ley Impositiva, exigen espacios de poder como sillas en el directorio del Banco Provincia y retomar las definiciones para completar las vacantes en la Suprema Corte de Justicia. Por caso, la UCR promueve para el máximo tribunal a la presidenta del Concejo Deliberante de General Pueyrredón, vicedecana de la facultad de Derecho de la universidad de Mar del Plata, exintegrante del Consejo de la Magistratura de la Nación y esposa del senador Maximiliano Abad, Marina Sánchez Herrero.

Desde el gobierno de Kicillof responden que no debe mezclarse la discusión del presupuesto con las vacantes judiciales, pero se muestran permeables a avanzar en los cargos directorio del Bapro. “Algunos se vencen y pueden cambiarse. Sería un alta por baja”, explican.

Todo indica que los libertarios puros rechazarán el paquete de leyes, pero desde el espacio hicieron saber que para acompañar o no el endeudamiento aguardarán las indicaciones que les dé el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo.

Las negociaciones con las bancadas opositoras las encabezan el ministro de Economía, Pablo López; la Secretaria General de la Gobernación, Agustina Vila; la vicegobernadora Verónica Magario; Guerrera;  el titular de la comisión de Presupuesto,  Juan Pablo de Jesús; y los presidentes de los bloques de Unión por la Patria, Tinganelli y Teresa García. La negociación está abierta y el final sigue siendo incierto.

El apoyo de la CGT y las dos CTA

En ese escenario, el Consejo Directivo nacional de la CGT y los Consejos Ejecutivos bonaerenses de la Central de los Trabajadores de la Argentina (CTA-de los Trabajadores) y la Central de los Trabajadores de la Argentina (CTA-Autónoma) se expresaron en favor de la aprobación del paquete de leyes de Kicillof.

La CGT emitió un comunicado cuyo título es “Presupuesto PBA: las provincias necesitan la aprobación de la Ley de Leyes”, en el que se pidió que se aprueben las iniciativas. “En momentos en que los gobiernos provinciales deben suplir las falencias de un Estado Nacional que se retira de sus obligaciones, los presupuestos locales son más necesarios que nunca”, se indicó.

Además, se sostuvo que “en un país federal, las provincias precisan de su presupuesto y, en este caso, la de Buenos Aires lo necesita, como así también al endeudamiento y la ley impositiva. Es la herramienta que les permite ejecutar sus políticas públicas y su desarrollo social a nivel provincial y municipal” y se añadió que la ley de leyes “garantiza los salarios de los trabajadores, los puestos laborales, la continuidad de las obras de infraestructura y la inversión en seguridad”.

En igual tono, el secretario de la CTA-de Los Trabajadores, Roberto Baradel, y el secretario general de la CTA-Autónoma, Oscar de Isasi, subrayaron la importancia de “asumir con compromiso el desafío de la unidad en la acción e interpelar a la población bonaerense con una agenda programática con iniciativas políticas que permitan sumar a distintos sectores sindicales, políticos y sociales de nuestra provincia”.

Ambas centrales expresaron la necesidad “de contar con la aprobación del presupuesto provincial enviado por el Poder Ejecutivo y todos los instrumentos legales que le permitan al gobierno bonaerense enfrentar las medidas de ahogo financiero de Milei y así poder ejecutar políticas públicas que beneficien a los trabajadores y trabajadoras y todo el pueblo bonaerense”.

Otros apoyos

El ministro de Infraestructura bonaerense, Gabriel Katopodis, pidió hoy la sanción de la ley de leyes: «Nuestra provincia tiene que definir su presupuesto, ordenar los impuestos que van a seguir financiando las políticas que votaron y requieren los bonaerenses , y autorizar los créditos que se necesitan para pagar las deudas que dejó la gestión macrista de Vidal», posteó en redes.

«Es un paquete de tres leyes que estoy convencido que se va a poder aprobar completo, construyendo los consensos necesarios antes de fin de año El gobernador Kicillof envió los proyectos hace 40 días y, a diferencia de Milei que quiere discrecionalidad por fuera de la ley, necesita esos instrumentos para seguir cumpliendo con cada uno de los ciudadanos bonaerenses», cerró.

En igual sintonía se expresó el intendente de Florencio Varela, Andrés Watson, quien aseveró: «Respaldo firmemente el presupuesto impulsado por el gobernador Kicillof y los proyectos de leyes que presenta en la Legislatura bonaerense» y añadió que las normas son fundamentales «para proteger los derechos de la ciudadanía, garantizar la continuidad de las obras y asegurar la inversión en materia de seguridad».

«En cuanto al aspecto fiscal, en términos reales, no se incrementa la carga tributaria en ningún sector», resaltó y planteó que «el endeudamiento, no engrosa las obligaciones financieras adquiridas, solo cubre los vencimientos de los compromisos heredados».

Luego, sostuvo: «Es imprescindible la aprobación simultánea de estos instrumentos para gestionar en un contexto de crisis ocasionado por la Presidencia de la Nación. La consecuencia de rechazar las normativas enviadas es un fuerte ajuste que deja a la Provincia en riesgo de default».

En la conferencia de prensa que encabezó el lunes pasado, el ministro de Gobierno, Carlos Bianco, pidió «una manito» a la oposición para destrabar la iniciativas y remarcó: “No se trata de un presupuesto de ajuste, sino de expansión. El proyecto prevé una inversión para obra pública, compra de patrulleros, ambulancias y fomento de la producción. Nuestros funcionarios, el titular de ARBA, Cristian Girard, y el ministro de Economía, Pablo López, lo han explicado. No hay debate respecto del contenido con la oposición sino una clara discusión política».

«El gobierno necesita esos elementos para ponderar tener una gestión normal, razonable y tranquila. Le pedimos a la oposición que lo vote. Los pedidos que nos hacen los intendentes sobre cloacas, patrulleros y obra pública están atados a eso. Sin presupuesto, será muy difícil tener todo eso», cerró.

Qué contempla en Presupuesto 2025

La ley de leyes para 2025 contempla gastos por más de 34 billones de pesos, prevé un déficit primario de 628.680 millones de pesos y un déficit financiero de 1.486.271 millones.

El Presupuesto 2025 contempla una inversión de 1,4 billones de pesos para inclusión social; 1,2 billones en salud; 1,2 billones en educación; 1,1 billones de pesos en seguridad. Paralelamente, la inversión en infraestructura será del 7,8% del gasto total; se destinarán 5 mil millones para el Programa de Fortalecimiento de las Industrias y las Pymes y más de 3,7 mil millones de pesos destinados al desarrollo de actividades productivas cooperativas.

El año próximo se sostendrá la misma presión tributaria alcanzada durante el año 2024. Por ello, en el proyecto de Ley Impositiva se dispuso que el impuesto Inmobiliario, tanto el Urbano como el Rural, tendrán topes de aumento del 28% anual.

Paralelamente, para casi el 90% de los contribuyentes, el aumento en la patente será solo del 13,8%, cuando el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) espera una inflación del 35% para 2025. Además, quienes están al día recibirán una reducción del 15% en su pago final.

A la vez, el Gobierno bonaerense decidió no realizar modificaciones en las alícuotas del impuesto a los Ingresos Brutos, una medida que busca sostener el alivio fiscal sobre los sectores productivos.

En tanto, los tributos como el Impuesto de Sellos y la Transmisión Gratuita de Bienes conservarán las mismas alícuotas que el año en curso, sin ajustes adicionales.