El presidente argentino, Mauricio Macri, mantuvo hoy un encuentro con el de Rusia, Vladímir Putin, en el que dialogaron para ampliar los vínculos económicos entre las dos naciones, en especial los proyectos de inversión rusa en Argentina y los lazos comerciales, informaron fuentes oficiales. Pero también tuvieron tiempo de hablar del Mundial que acaba de terminar. «Rusia es actor clave en el mundo y un socio estratégico para la Argentina. Estamos avanzando mucho en diferentes campos», afirmó Macri en la reunión, que se celebró en Johannesburgo, en el marco de la X Cumbre del bloque de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), a la que asiste como invitado por los surafricanos, que ejercen la presidencia de turno del bloque.
Argentina ostenta la presidencia temporal del G20 y, bajo esa premisa, Macri participará mañana en la sesión de trabajo del grupo «BRICS Plus», una iniciativa diseñada para aumentar la cooperación sur-sur. «Nuestras relaciones son exitosas, el intercambio nuestro crece y queremos ampliar esa cooperación», expresó Putin, según un comunicado difundido por la Presidencia argentina.
Macri valoró positivamente la llegada de recientes inversiones rusas a Argentina y citó como ejemplo a la empresa TMH y su desembolso de 3 millones de dólares para reactivar un taller ferroviario. «Queremos ampliar las inversiones en el parque ferroviario y para eso tenemos en la Argentina ambiciosos planes de Participación Pública Privada para el desarrollo de la infraestructura (…). Por eso, es importante que firmas rusas sigan compitiendo y presentándose a licitaciones», destacó.
Macri también le expresó «entusiasmo» a Putin por una mayor apertura en el área agroindustrial e indicó que Argentina podría exportar a Rusia embriones y semen bovinos, huevos fértiles y maquinaria agrícola. También le propuso que empresas rusas participen en la exploración y explotación de uranio en el sur de Argentina.
Las negociaciones en el seno del G20 (grupo de economías desarrolladas y emergentes), la política nuclear y el Acuerdo de París (2015) para luchar contra el cambio climático fueron otros de los temas abordados.
Argentina exporta a Rusia principalmente alimentos, mientras que las importaciones las protagonizan el gasóleo, los fosfatos, abonos y el caucho, entre otros. Antes del final de la jornada de hoy, Macri también se entrevistó con el presidente de China, Xi Jinping, y más tarde con el primer ministro de la India, Narendra Modi.
Mañana, última jornada de la cumbre, el mandatario argentino se reunirá con el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa; el de Brasil, Michel Temer, y el de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, quien también asiste en calidad de invitado. Los países BRICS son hogar de algo más del 40 % de la población mundial y su participación total en la economía mundial ha aumentado del 12 % al 23 % en la ultima década. Esta cumbre viene marcada por mensajes del bloque en defensa del multilateralismo y el libre comercio, en un contexto internacional condicionado por la deriva unilateral y proteccionista del Gobierno de Estados Unidos.
En tanto, el bloque de potencias emergentes de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) se comprometieron a «fortalecer las instituciones multilaterales de gobernanza global» para atajar los «desafíos» en el mundo. «También reconocemos la inherente fortaleza de iniciativas regionales en apoyo de los objetivos de un sistema multilateral más amplio», afirmaron los líderes de los BRICS en la llamada «Declaración de Johannesburgo», el comunicado final de la X Cumbre del bloque celebrada esta semana en esa ciudad sudafricana.
Las potencias emergentes subrayaron su «disposición a trabajar juntos para fortalecer el multilateralismo y el imperio de la ley en las relaciones internacionales». En esa defensa de un mundo multilateral, los líderes de los BRICS subrayaron su apoyo al «papel central de las Naciones Unidas en los asuntos internacionales». Firmaron la «Declaración de Johannesburgo» los presidentes de Brasil, Michel Temer; Rusia, Vladímir Putin; China, Xi Jinging; Sudáfrica, Cyril Ramaphosa; y el primer ministro de India, Narendra Modi.
La reunión de los BRICS, que representan algo más del 40 % de la población mundial y el 23 por ciento del producto interior bruto del planeta, se celebra en un contexto internacional marcado por la política unilateral y proteccionista de EEUU, enfoque que no comparte el bloque, más partidario del multilateralismo. Sin nombrar nunca a EEUU pero en clara alusión a las medidas unilaterales y proteccionistas de su presidente, Donald Trump, los líderes del grupo han condenado en la cumbre esa política y han apostado por la vía multilateral y el libre comercio.
El mandatario más duro con Washington ha sido el presidente chino, quien hoy instó al bloque a «rechazar rotundamente el proteccionismo». Xi hizo esos comentarios mientras la guerra comercial declarada por Trump no tiene visos de remitir.
El pasado día 20, el inquilino de la Casa Blanca aseguró estar «dispuesto» a imponer aranceles a las importaciones procedentes de China por valor de 500.000 millones de dólares, en la que sería la tercera batería de gravámenes al gigante asiático este año.
De cumplir esa amenaza, sería la tercera batería arancelaria que Washington adopta contra China, con la que Trump ha enzarzado a EEUU en una guerra arancelaria desde principios de julio.