Los científicos estadounidenses David Baker y John Jumper y el británico Demis Hassabis ganaron el Premio Nobel de Química por los distintos aportes que realizaron en la comprensión de la estructura y comportamiento de las proteínas, moléculas clave para el desarrollo de la vida, anunció hoy la Real Academia Sueca de Ciencias.
“Uno de los descubrimientos que se premian este año se refiere a la construcción de proteínas espectaculares. El otro se refiere a la realización de un sueño de hace 50 años: predecir las estructuras de las proteínas a partir de sus secuencias de aminoácidos. Ambos descubrimientos abren enormes posibilidades”, afirmó Heiner Linke, presidente del Comité Nobel de Química, en un comunicado.
Las proteínas están formadas por 20 aminoácidos diferentes, que pueden describirse como los componentes básicos de la vida.
En 2003, David Baker -quien recibirá la mitad de premio- logró utilizar estos componentes para diseñar una proteína nueva que no se parecía a ninguna otra.
Desde entonces, su grupo de investigación ha producido una proteína tras otra, incluidas proteínas que pueden utilizarse como fármacos, vacunas, nanomateriales y sensores diminutos.
La otra mitad del Nobel es para Hassabis y Jumper, y tiene que ver con la predicción de la estructura de las proteínas.
«En las proteínas, los aminoácidos están unidos entre sí en largas cadenas que se pliegan formando una estructura tridimensional, que es decisiva para la función de la proteína. Desde los años 70, los investigadores habían intentado predecir la estructura de las proteínas a partir de las secuencias de aminoácidos, pero esto era notoriamente difícil. Sin embargo, hace cuatro años se produjo un avance sorprendente», explicaron desde la Real Academia Sueca de Ciencias.
En 2020, Hassabis y Jumper -quienes trabajan actualmente en Google- presentaron un modelo de inteligencia artificial llamado AlphaFold2 con el que han podido predecir la estructura de prácticamente todas las 200 millones de proteínas que los investigadores han identificado.
Desde entonces, AlphaFold2 fue utilizado por más de dos millones de personas de 190 países: entre una gran cantidad de aplicaciones científicas, los investigadores ahora pueden comprender mejor la resistencia a los antibióticos y crear imágenes de enzimas que pueden descomponer el plástico.
David Baker nació en 1962 en Seattle, Estados Unidos, se doctoró en 1989 en la Universidad de California y actualmente es profesor en la Universidad de Washington.
Por su parte, Demis Hassabis nació en 1976 en Londres, Reino Unido, se doctoró en 2009 por el University College London y hoy es director ejecutivo de Google DeepMind, donde también es investigador senior John Jumper, nacido en Little Rock, Arkansas y doctorado en 2017 por la Universidad de Chicago, Illinois.